Tras protagonizar uno de los mayores escándalos televisivos de la temporada durante su paso por el reality de T5, ‘Acorralados’, a Sonia Baby hace tiempo que no la veíamos. Pero la acróbata vaginal y ex actriz porno ha vuelto más salvaje que nunca y se monta su escenita sexual junto a su novio en la revista ‘Primera Línea’ y, de paso, vuelve a hablar de sexo, futuro y abusos sexuales.
Para cubrir la dosis (necesaria en un reality) de erotismo y morbo, la primera edición del concurso de T5 ‘Acorralados’ fichó, en septiembre de 2011, a una desconocida para el gran público: Sonia Baby, ex actriz porno y actual acróbata vaginal, capaz de meterse, desde 20 paquetes de cigarrillos a 30 metros de un collar de perlas en sus partes íntimas.
Aunque no duró ni un mes dentro de aquella granja para famosos, Sonia Moreno Jiménez -que así se llama realmente la moza- estuvo en el ojo del huracán por un escándalo de índole personal. Mientras estaba en el reality confesó que había sufrido todo tipo de desgracias y abusos durante su infancia y su familia se apresuró a salir en la tele para cobrar e insultarla. Su madre llegó a plantarse en ‘Sálvame Deluxe’ y a declarar que su hija era prostituta y mala pero que la quería muchísimo.
Pero Sonia no se dejó doblegar y ella siguió a lo suyo con sus espectáculos por toda España y con su relación sentimental con Omar, bailarín profesional que se dio a conocer gracias a otro reality, ‘Fama, a bailar’ (Cuatro). Ahora, ambos se lo quitan todo y se confiesan para la revista ‘Primera Línea (número de marzo de 2012)- Sonia Baby: «Hago virguerías con mi vagina, mi caja mágica»- . Entre otras cosas, Baby le confiesa al reportero Quique Jiménez, más conocido como ‘Torito’:
De pequeña quería ser artista. Aunque en realidad solo aspiraba a ser cajera de supermercado y ensayaba con una caja de cartón, como si fuera la máquina registradora.
Mi infancia fue solitaria, triste y con mucha falta de cariño. Ninguno de mis hermanos me dijo nunca que me quería o me dio un beso.
Me trataron mal de pequeña porque yo fui fruto de un desliz de mi madre con otro hombre. Mi padre me lo dijo, pero pensé que no era verdad. Ahora me lo han confirmado mis tías. Desde siempre vi que mis hermanos eran muy diferentes físicamente a mí.
Cuando mi padre tuvo un accidente, mis hermanos se convirtieron en los que mandaban en casa. Faltaba al colegio porque me obligaban a hacer las labores del hogar. Si no limpiaba bien, me pegaban. He llorado mucho de pequeña. Hasta mi tía me quiso sacar de casa: me encontró desnutrida.
Yo era muy pequeña y mi abuela pilló a mi hermano abusando sexualmente de mí en un trastero. Lo sufrí durante bastantes años. Con mis dos hermanos. Yo les tenía mucho miedo porque me amenazaban para que no lo contara.
La mayoría de las chicas que sufren abusos se vuelven prostitutas, autistas o caen en las drogas. Es la única manera de superarlo. Supongo que por eso me metí en el porno.
Una vez me contrataron para una fiesta de góticos. Hice el show vestida de momia con la boca cosida.
En una discoteca me hice un corte en los labios vaginales con las cuchillas, y empecé a sangrar. Desde entonces les he cogido respeto.
Me encantaría hacer un show vestida de piloto de Fórmula 1 y sacarme un coche teledirigido de abajo, como si mi vagina fuera una cochera.
Mi intención es seguir tres años más, lograr mi último récord, retirarme y empezar a estudiar diseño grafico.
Quiero llegar a introducirme 200 metros de banderas. Ahora me introduzco 150.
Cuando me convencieron para entrar en el porno, lo hice en parte para superar cosas y porque me hacía falta el dinero. Al terminar las escenas me sentía traumatizada. Era horroroso. Me tocó trabajar con Nacho Vidal, y da miedo. Sólo hice 12 escenas, pero se vendió un montón. Una de nuestras pelis fue de las más vendidas en EE UU.
Al principio, en el sexo, Omar, mi novio, estaba acojonado, pensaba que no iba a estar a la altura, y se dio cuenta de que el sexo para mí es un trago bastante difícil. Prefiero hacerlo con cariño y que me traten bien. Me sigue costando mucho hacerlo. Llevo fatal cuando alguien me insiste para practicar sexo. Saco una Sonia que no me gusta, y he llegado a dejar a parejas por ese motivo.
Lo peor que se dijo de mi en la tele fue que mi madre me llamara prostituta. No se lo perdonaré en la vida. Si la tuviera en frente, me desplomaría.
Quién más me decepcionó en la tele fue Kiko Hernández. Me caía súper bien, pero hizo una exagerada campaña en mi contra durante el concurso.