A una semana de la gran final de ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’, el programa de Cuatro sigue regalándonos la vista con más desnudos. Aris, una de las finalistas a conquistar el corazón de el ‘pijo’ José Luis y de su temible madre, Toya, es la tercera participante que se quita la ropa y lo hace sin pelos en la lengua.
Tiene 27 años, es elegante, morena, rumana aunque de nacionalidad belga (por su padre), llegó a España con doce años, se dedica al marketing, controla varios idiomas, es sofisticada, viajera y, como ella misma dice, «prepotente». Así es Alis, una de las participantes de una de las revelaciones televisivas del año: ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’.
Y es que el programa de Cuatro está dando mucho de qué hablar. La estrategia no es nueva -cinco chicos buscan esposa (uno de ellos, marido), de entre varios candidatos que han de hacerse primero con la aprobación de su quisquillosas suegras- pero la falta de originalidad se suple con un casting variado y brillante y una buena dosis de conflictos, peleas, polémicas y sexo. Mucho sexo.
De entre todos los protagonistas, sin duda, las ‘estrellas’ de esta primera temporada -que finalizará el próximo lunes 26 de marzo de 2012- son el abogado y cantante lírico, José Luis y su magnánima madre Toya. Para conquistarle a él han acudido multitud de chicas pero pocas se han quedado hasta el final. Una de las ‘afortunadas’ ha sido Alis, quien entró con muy buen pie pero que lo tiene crudo para ganarse el corazón de su ‘amado’. A ella parece darle igual ya que reconoce que:
A lo mejor soy demasiado para José Luís
Esta es una de las jugosas declaraciones que Alis vierte en su entrevista para ‘Interviú’. ¿Y a qué viene este cambio repentino ante un hombre que aparentemente le gustaba? Pues un comentario de Toya, que la tachó de ir demasiado de «princesita». A este respecto la belga reconoce que:
A mí no me molesta que me llamen princesita, tampoco sé en qué sentido lo decía, quizá por mi modo de vestir… Es cierto que a veces soy caprichosa, e incluso prepotente con la gente con la que no me siento a gusto. Soy muy seria, y eso se nota cuando me conocen por primera vez, nunca pierdo el control de las situaciones. Además, soy muy fiel… y del Real Madrid, porque mi padre también lo es.
De hecho, salir desnuda en Interviú es un desafío y una provocación hacia Toya, quién ya se escandalizó porque Christiane, otra de las pretendientes de su hijo, se desnudó para la misma revista.
Está claro que Alis no será la elegida de J.L pero todo puede pasar. También hay que tener en cuenta que Alis cumple uno de los requisitos esenciales de Toya puesto que la joven reconoce que es muy religiosa, que suele rezar y que su casa está decorada con «iconos religiosos».
OTRAS POLÉMICAS SEXUALES
Pero este no ha sido el único ‘escándalo’ erótico que nos ha dado ¿QQCCMH?’, ni siquiera es el más polémico. Y es que el docu-reality nos ha ofrecido una buena cantidad de titulares desde su estreno.
El 1 de febrero de 2012 salió a la luz el ‘curioso’ pasado de Sandrita, una de las pretendientas de David. Durante el primer programa, la joven confesó que era stripper pero pronto se descubrió que, en realidad, se llama Sandra Cruz, una conocidísima actriz porno española, que lleva ya muchos años trabajando con la productora Cumlouder.
Más tarde, el 21 de febrero de 2012, Abel Arana, desde su blog ‘La columna de Abel Arana’, informó que Christopher La Orden, uno de los candidatos a conseguir el amor de Luis Ángel y de su madre Carmen en ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?, había sido protagonista de una película porno gay antes de saltar a la fama en el programa.
Después se descubrió que, la ya mencionada Chirstiane, había posado en desnuda en ‘Interviú’ ya que era famosa por ser amiga de César Pérez, entrenador de Marta Domínguez, que supuestamente fue vigilada por su supuesta implicación en la ‘Operación Galgo’.
El 12 de marzo de 2012, otra participante volvió a darlo todo en ‘Interviú’. Hablamos de Ainara Barciela, pretendienta de David, el chico que es químico de día y stripper de noche, quien fue expulsada por confesar que había mantenido una relación con un jugador argentino del Real Madrid.