ablo Motos estuvo por una vez acertado, y mostró sus diferencias con Évole
Jordi Évole dice que él no es independentista pero… Ese pero le permite desde sacarse una amistosa fotografía con el etarra Arnaldo Otegi o lamentar que la Justicia haga su trabajo y meta en prisión a unos delincuentes que desafiaron el Estado de Derecho, como hizo este 2 de noviembre de 2017.
Había que verle la cara: estaba hundido, tocado, jodido. Como catalán, dijo. Ya había tuiteado «Qué desastre», cuando se supo las sentencias. Lo mismo por cierto que Ana Pastor:
Hoy vengo en carne viva, vengo tocado y con un punto de emoción. No me voy a divertir hoy
Hoy un día muy jodido para todo el país y además si eres catalán un poquito más.
Fue lo primero que dijo Évole nada más pisar el plató de ‘El Hormiguero’. El presentador de ‘Salvados’ quería hablar de Cataluña, de las detenciones a nuevo exconsejeros del Govern catalán que habían ocurrido ese mismo día y que para él.
Arrastraba una pena terrible por los golpistas en la cárcel. Lo sorprendente es que era el mismo Évole que puso en una gran entrevista contra las cuerdas a Carles Puigdemont —Jordi Évole arrincona a Puigdemont al recordarle que votó ‘no’ al referéndum del Kurdistán–:
Esa no es la solución; es un problema político que hay que arreglar con la política. hay cosas tan paradójicas como que tenemos a un Govern en la cárcel y en cambio no sé esa justicia qué hace con personas juzgadas y que no están en prisión. Yo creo que en Cataluña no hay gente que se siente más protegida por verles en la cárcel, no es la solución.
Évole quiso dejar claro que no es independentista –¡faltaría más!– pero que este tipo de acciones son una «equivocación enorme; en esto hay una actuación inmediata e inmisericorde». ¡No se te veía tan deprimido, Jordi, cuando los que entraban en prisión eran los del PP!
La situación allí se ha polarizado mucho. Yo que en mucho tiempo me he negado que existía la polilaridad es una realidad.
Tenemos que capearlo y superarlo. Tenemos que preservar la convivencia.
La independencia es una parte de la sociedad catalana que no se va a borrar. Ha venido para quedarse.
Eso ha crecido pero no hay que olvidar a la otra parte. Hay que entender esa sociedad plural que no se puede romper. Con actuaciones como las de hoy no se colabora para ello. Han conseguido cohesionar de nuevo al independentismo.
Un líder político con altura de miras tiene que saber decirle a su gente decirles lo que no quieren oír. Aquí va a llegar un punto en el que va a ganar el que frene.
Me hubiese gustado escuchar a Puigdemont decir que a lo mejor no podemos llegar por ahora hasta donde queríamos llegar o a Rajoy decidirse por un ‘igual tenemos que negociar’
¿Qué normalidad va a tener esas elecciones con esas personas en la cárcel? ¿Qué tipo de campaña electoral vamos a vivir? esto no necesita un mediador, necesita la supernanny.
Hay que decir que Pablo Motos estuvo por una vez acertado, y mostró sus diferencias con Évole. No compartía la pena del director de ‘Salvados’ y le recordó que la jueza no podía dictar sentencias en base a humor social y que Puigdemont tuvo en sus manos parar esto y no lo hizo. Así se lo hizo saber con elegancia a Évole, que se quedó sin respuestas.