Terelu Campos ha pasado una de las peores semanas de su vida pero era todo un truco. En menos de siete días, la colaboradora de ‘Sálvame’ ha pasado de ser una «déspota» maniática a ser una víctima incomprendida. ¿Cómo lo han hecho?
Hay un truco que infalible si quieres lavar tu imagen: Deja que se tense la cuerda en tu contra y, al final, los ataques se convertirán en piedad y comprensión. Cuando alguien es machacado es exceso-aunque sea con razón- termina transformándose en víctima. Nunca falla. Y si no que se lo digan a Terelu Campos.
No te equivoques, Terelu, no te están haciendo la cama… ¡Es peor que todo eso!
El miércoles 30 de mayo de 2018, tras la exclusiva que dio la hija de María Teresa Campos en la revista Lecturas, en ‘sálvame’ cargaron contra ella. Empezaron a salir testimonios de gente que había trabajado con ella cuando presentaba ‘Con T de Tarde’ en Telemadrid y que tachaban a la por entonces presentadora como una «déspota» y una maniática que trataba muy mal a sus trabajadores.
El viernes, Terelu se fue llorando del plató, el sábado, en el ‘Deluxe’ se celebró un debate sobre ella pero sin ella. Todo eran palos contra la periodista: Que si era una «cobarde», una «acomplejada», una maniática que hacía la vida imposible a los demás. Fin de la primera fase: Terelu era la mala, ‘malísima’ de T5
Y el lunes, al final, Terelu se enfrentó a sus compañeros y la cosa cambió. Durante dos horas, Campos aguantó el tipo y lo que dos días antes eran reproches, esa tarde fueron halagos.
Terelu confesó sentirse insegura, negó todo lo que se decía de ella, admitió ser maniática pero juró que jamás querría hacer daño a los demás.
Y como siempre pasa en ‘Sálvame’, los colaboradores recularon. Todos querían Terelu, así, de pronto. Era la gran heroína de T5. Así nos manipulan en la tele.