EL futbol, como casi todos los deportes, genera pasiones, pero sobre todo dentro del campo, donde una sensación de frustración puede terminar en tragedia, o como mínimo en una acción antideportiva.
Eso le sucedio a Luis Henrique, jugador del juvenil del Botafogo, quien reaccionó de manera violenta tras recibir un caño de parte de Guilherme, del Cuiabá, durante el partido en el que ambos equipos se enfrentaron en el marco de la Copa de Fútbol Junior de San Pablo, más conocida como la Copinha 2019.
Transcurría el minuto 33 de la segunda parte, con Cuiabá con ventaja de 1-0 en el marcador. Guilherme cubrió una pelota sobre el lateral y salió jugando haciéndole un caño de taco a Luis Henrique, todo un lujo.
Pero el de Botafogo no lo supo asimilar y reaccionó aceleradamente, de la forma más violenta: le pegó una durísima patada desde atrás a su rival.
La agresión del joven del conjunto carioca casi genera una gresca entre los futbolistas. Sin embargo, todo se diluyó rápidamente ya que hasta el propio entrenador del «Fogão» retó a su jugador dentro del campo.
Finalmente, Luis Henrique vio la tarjeta roja y dejó a su equipo con diez hombres de cara al tramo final del encuentro. En estas condiciones, Botafogo ya no pudo remontar el resultado y sufrió una derrota.
