Mientras arrecian las denuncias por violaciones de refugiados musulmanes a mujeres en las piscinas públicas alemanas, -tal y como figura en un reciente documento de la policía de Duesseldorf-, algunos de ellos se dedican ahora a dar lecciones de moralidad en tales espacios a voz en grito. (Las suecas en bikini que acojonan a los refugiados salidos: ¡Batallón Antisobón!).
Este martes 26 de julio de 2016, un grupo de fanáticos refugiados islamistas irrumpió en una piscina nudista de Geldern, Alemania, al grito de ‘Alá es grande’, mientras amenazaban a las mujeres allí presentes con exterminarlas y las llamaban «putas». ( [VÍDEO] ¡Taharrush! El sucio juego sexual de los musulmanes salidos que amenaza a toda Europa).
La entrada a la piscina donde han ocurrido los hechos
Según da cuenta ‘Daily Mail‘, eran seis barbudos asaltantes y rondaban los 20 años. Además de insultar a las féminas que nadaban desnudas, también se refirieron a los hombres como «infieles». (El campeón de kick boxing le parte la cara a cuatro musulmanes que querían violar a dos chicas en Colonia).
Una de las empleadas de la piscina consiguió echarles debido al escándalo que estaban montando. Una de las mujeres de la piscina les plantó cara diciendo de forma irónica:
«Sí, lleváis razón, las alemanas somos todas unas putas y nos merecemos ser exterminadas».
Al parecer, después de ser expulsados de la piscina se fueron a un club de esquí acuático para increpar de nuevo a los allí presentes. (Los sórdidos detalles del asalto sexual de la ‘mafia’ musulmana en Colonia).
No es la primera vez que este tipo de incidentes ocurre en el país. La policía alemana ha registrado varias denuncias contra inmigrantes por abusos sexuales en los baños públicos de las piscinas. ([VÍDEO] Así da el karateca una paliza de muerte a 4 macarras musulmanes por meter mano a su rubia esposa).
VIOLACIONES
En cuanto a los mencionados delitos sexuales en tales lugares, la Asociación Profesional de Natación de Alemania quiere reducirlos estos delitos y ofrecerá a los inmigrantes formarse como socorristas:
«Sería una medida de inserción y que traería beneficios para todos».
En varias piscinas alemanas, incluidas las de Múnich, se están poniendo carteles que animan a enseñar a los inmigrantes a respetar a las mujeres y los niños.
Los musulmanes que han llegado al país tratan el sexo como tema tabú en sus países de origen. Y muchos, sexualmente reprimidos, han propagado la idea de que los bikinis diminutos de las mujeres son una declaración implícita de que quieren sexo.
