Maradona lo vuelve a hacer. Tras producir el milagro de clasificar a Dorados de Sinaloa a la Liguilla por el ascenso, Diego Armando Maradona va por más y ahora busca un boleto a la Liga MX. Sin embargo, su camino no se inició de la mejor manera. (¿Qué esconde la curiosa felicitación de Pelé a Maradona por su 58 cumpleaños?)
En el estadio Banorte de Culiacán, el Gran Pez igualó 0 a 0 por la ida de los cuartos de final ante Mineros de Zacatecas y quedó obligado a ganar la revancha para seguir avanzando en el certamen, ya que su adversario cuenta con ventaja deportiva por haber finalizado en una mejor posición en la tabla general. La vuelta será el próximo sábado.
El director técnico del conjunto de Culiacán vivió el partido con gran intensidad y sufrió un vaivén de emociones. El Diego llegó al estadio bailando al ritmo de la cumbia Amar Azul, pero su entusiasmo prosiguió en la entrada en calor, cuando se animó a tirar algunos pasos en la mitad de la cancha al escuchar «Me vas a extrañar», uno de los últimos hits de Pablo Lescano. (La cruda confesión de Maradona y Julio César Chávez sobre su relación con las drogas)
Una vez comenzado el juego, Maradona volvió a brindar un nuevo show desde el banco de suplentes. Durante la primera parte, los nervios hicieron que se comiera las uñas y hasta tuvo tiempo para escuchar un mensaje que recibió en su celular. También se lamentó por el increíble gol que desperdició Galíndez, que de frente a un arco
vacío la tiró afuera.
Al finalizar el encuentro, el director técnico, junto con el argentino Gaspar Servio, increparon con vehemencia al árbitro Edgar Ulises Rangel Araújo. La furia brotaba por los poros del 10, y Luis Islas, su ayudante de campo, tuvo que intervenir para calmarlo.
