El Comité Nacional del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) se ha trasladado este martes 22 de julio de 2014, a la prisión de Albolote, en Granada, para anunciar que sus 40 miembros se declaran en huelga de hambre y que permanecerán acampados allí hasta lograr la libertad de los dos condenados a tres años de cárcel por su actuación durante un piquete del 15M en la huelga general del 29 de marzo de 2012.
Así lo ha señalado en declaraciones a los periodistas el líder nacional del SAT, Diego Cañamero, quien ha criticado una condena por «luchar por la Justicia». «Si les cae a ellos tres años y un día de cárcel no habrá cárcel ni horas de cárcel para todos los mangantes que están haciendo sufrir a la población», ha subrayado.
Cañamero ha considerado que Carlos C.N. y Carmen B.C. son «presos políticos», algo que, en su opinión, «no puede haber» en democracia. Por ello, los 40 miembros del Comité Nacional del SAT irán llegando paulatinamente a las puertas de la prisión de Albolote para unirse a una protesta que incluirá acampadas en el centro penitenciario y que no tiene horizonte temporal, pero que comenzará la misma noche de este martes.
Pasadas las 10,30 horas, una veintena de sindicalistas ha llegado en varios vehículos hasta el parking del centro penitenciario, tras ser identificados por la Guardia Civil, que se encontraba en la rotonda de acceso, y con pancartas con las que piden la libertad para Carlos y Carmen han comenzado a dirigirse hacia el interior de la cárcel gritando consignas como ‘Nos tocan a uno, nos tocan a todos’. Así, han llegado hasta la zona de cafetería, pero los funcionarios les han instado a salir porque estaba impidiendo el normal acceso a las instalaciones.
Por ello, han decidido atender a los medios en el exterior de la cárcel, para pedir la «inmediata libertad» de los dos condenados y reclamar a la ciudadanía que envíe al Gobierno su solicitud de indulto para los dos condenados. Para reivindicarlo, acamparán «en la misma puerta» de la cárcel en un «gesto por unos luchadores», que tienen que estar «en la calle» y no en prisión.
«NO HAN HECHO NADA PARA ESTAR EN LA CÁRCEL»
«No han hecho absolutamente nada para estar en la cárcel», ha mantenido el sindicalista, que ha recordado que fueron condenados «por un piquete informativo donde no ha habido agresión ni altercados». Por ello, ha indicado que «flaco favor» se hace a la democracia con este tipo de penas, y ha reclamado la «independencia» de jueces y fiscales en estos casos, instándoles a no limitarse a acatar las órdenes «de brazos políticos que mandan a reprimir al movimiento obrero».
