Ante esta situación, el gobierno de Barreda tiene a los funcionarios totalmente abandonados
Los funcionarios de la región han querido manifestar su total y más absoluto desacuerdo con la aprobación de la Ley de Empleo Público de Castilla-La Mancha.
La Unión Sindical Obrera (USO-Toledo) ha considerado que la situación que viven los empleados públicos es totalmente insostenible. El gobierno de Barreda ha realizado una serie de reformas inaceptables que, junto a los recortes salariales y sociales, han acabado con la paciencia de los funcionarios.
Les comentamos algunos de los puntos en que se basa el sindicato para mostrar su descontento con los señoritos socialistas del cortijo manchego:
La situación de los funcionarios en la Junta de Comunidades
Lo lógico sería que los funcionarios sean empleados públicos respetados y valorados por los cargos políticos. En este caso y según alerta USO, en las dependencias de la Junta nadie sabe quién es funcionario y quién está en la misma oficina a través de empresas privadas.
Estos empleados subcontratados son abundantes, probablemente demasiados. No llevan ningún tipo de acreditación y generan confusión entre aquellos usuarios que quieren entregar su documentación a los empleados públicos
Es alarmante la falta de convocatoria de oposiciones, en cuanto que obstruye el derecho constitucional de los ciudadanos, de acceso a la función pública.
USO advierte también de que no es justa la firma, por parte de algunas organizaciones sindicales, de la Ley 7/2007, Estatuto Básico del Empleado Público. El Estatuto está creando problemas y, sobre todo, injusticias. En todo caso se debería haber firmado en otras condiciones.
El tratamiento que el Gobierno de Castilla-La Mancha está dando a diversos colectivos de funcionarios -como el de los químicos, el de los biólogos y el de los informáticos- es indecente
El despilfarro del gobierno de Castilla-La Mancha
La agrupación sindical toledana de funcionarios se financia con las propias cuotas de sus afiliados en un 98%. USO exige que se todas las formaciones del sector tomen ejemplo, para lo que Barreda debería recortar las cuantiosas subvenciones que se reparten entre unos pocos.
Igualmente, USO alerta de la cantidad de liberados sindicales que existen en la región.
La oscura política económica practicada por el Gobierno de Castilla-La Mancha está afectando a los parados, jubilados y funcionarios. Todos ellos ven disminuidos sus ingresos, mientras que los asesores políticos cesados de cara a la prensa, se recolocan en empresas cercanas a la Administración, con una pensión de jubilación privilegiada
También se hace referencia al desmesurado número de empresas, fundaciones de carácter público existente en la Comunidad Autónoma, a pesar de la crisis.
El presidente aristócrata Barreda tiene otro frente abierto. La difícil situación en que se encuentra la región castellano-manchega contrasta mucho con los sueldazos de los socialistas del gobierno regional, así como con la preocupación del jefe del Ejecutivo en guardarse las espaldas con su jubilación ‘de oro’.
