Doña Clementina perdió su gabardina

La mujer de Barreda usa a los ujieres como si fueran sus sirvientes

Acostumbrada a su condición de aristócrata, echó mano del personal para buscar la prenda en el WC del Congreso de los Diputados

Se desconoce si para avisar a la ujier hizo un chasquido de dedos, utilizó una campanilla dorada o empleó algún otro sistema habitual para llamar al personal de servicio

Cual señorona acomodada, la diputada socialista y esposa de José María Barreda, Clementina Díez de Baldeón, no dudó ni un segundo en ordenar a una ujier del Congreso de los Diputados recoger su gabardina después de habérsela dejado olvidada en el WC.

Clementina salío corriendo del WC para aparentar que trabajaba y para votar las nefastas políticas de Zapatero. Recordemos que la esposa de Barreda es una fiel aliada de ZP, a quien respeta al máximo y por quien vota lo que haga falta: desde las nefastas medidas que perjudican directamente a los intereses de Castilla-La Mancha hasta la ley del aborto que más tarde criticó su marido con el fin de ganarse un puñado de votos.

Cuando escuchó la llamada para acudir al hemiciclo, Clementina se dio cuenta de que se había dejado en el baño su gabardina, por lo que llamó a una ujier para que le recogieran la prenda.

No hubo mucha suerte en la búsqueda, ya que la gabardina ya había desaparecido, según recoge el rotativo ‘Negocio & Estilo de vida’.

Probablemente Clementina se sintió en el Congreso una ‘todopoderosa’ con derecho a ordenar a los ujieres lo que le vino en gana. Se debió pensar que estaba en su cortijo particular y personal: la macro finca de La Membrilleja, donde hace y deshace con su personal de servicio.

Se desconoce si para avisar a la ujier hizo un chasquido de dedos, utilizó una campanilla dorada o empleó algún otro sistema habitual para llamar al personal de servicio.

Clementina es muy conocida por dos motivos. Uno de ellos es por estar casada con Barreda. El otro es que la socialista acostumbra a hacer en Madrid lo contrario a lo que su marido predica en Castilla-La Mancha.

La subida del IVA, la congelación de las pensiones, la bajada de los sueldos de los funcionarios… Todo eso está respaldado por la esposa del presidente autonómico, pese a que Barreda escenifica un papel de rebelde ante los medios cuando quiere desvincularse de lo que Zapatero y su esposa hacen en el Congreso.

Para votar ese tipo de traiciones a C-LM hay quien dice que Clementina se podía haber quedado en el WC. En cualquier caso, entre los pasillos del Congreso de los Diputados se comenta que tampoco se le deberían caer los anillos por recoger ella misma su ropa de abrigo.

De todas formas, Clementina no debió utilizar a los ujieres y trabajadores del Congreso de los Diputados como si fuera un servil sirviente. ¿Se tendrá bien aprendido el rol de señorona dada su casta aristocrática o debido al mundillo clasista en que se desenvuelve cuando sale de su domicilio madrileño rumbo a Castilla-La Mancha con su marido?

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