Como en la mayoría de fobias, la aerofoboa, el miedo a volar, tiene sus síntomas.
Son el ataque de ansiedad, taquicardia, mareo, sudoración e incluso vómitos, un malestar que puede producirse al subir al avión o simplemente al pensar que vas a tener que volar.
Para ayudarte a superar esta situación, hoy te damos 5 consejos básicos que harán tus viajes en avión mucho más llevaderos.
La lógica aplastante
El aéreo es uno de los transportes que pasa más controles de seguridad y calidad. Tanto los aviones como su tripulación son sometidos a rigurosos exámenes para garantizar su máxima eficacia. Todo ello hace que, estadísticamente, el avión sea el medio de transporte más seguro que existe. Un dato: incluso aunque un motor del avión se parara, la aeronave podría seguir su ruta y aterrizar sin problemas con un único motor.
Mejor prevenido
A lo largo del vuelo pueden producirse varias situaciones que te pueden poner nervioso, conócelas y evita así que te pillen desprevenido. Aquí te comentamos algunas de ellas:
Flaps y tren de aterrizaje. Al despegar el avión oirás un ruido muy fuerte seguido de un golpe seco, se trata del tren de aterrizaje que se recoge. Ya en el aire y a suficiente altitud, también se recogen los flaps, que provocan un ruido como de chapa metálica. Tranquilo, todo es normal.
Turbulencias. Es probable que en algún momento del vuelo se produzcan turbulencias. Se trata de un fenómeno atmosférico normal y con diversas intensidades, en ningún caso pone en peligro la seguridad del vuelo.
El valor de una buena distracción
Libros, revistas, música, un buen compañero de viaje y hasta macramé… Hay mil y una opciones con las que podrás entretenerte antes de que el avión despegue y durante el vuelo, cualquier cosa para distraer la mente y dejar de pensar en el miedo que te produce volar.
Comodidad
Es importante que durante el vuelo te sientas cómodo, ello te ayudará a sentirte más relajado y tranquilo. Por eso te recomendamos que viajes siempre con ropa cómoda y más bien ancha, para evitar cualquier sensación de ahogo, y acomódate de la forma más placentera posible. Es recomendable también que pidas un asiento de pasillo, alejado de las vistas de las ventanillas.
Técnicas de relajación
Para conseguir la máxima tranquilidad en el día del vuelo, te recomendamos que evites tomar cafeína y las comidas pesadas. Practica en casa alguna técnica de relajación, como las respiraciones profundas y los pensamientos positivos, que puedan ayudarte una vez estés en pleno vuelo. Puedes incluso tomar algún remedio homeopático o natural que te ayude a relajarte. Si lo crees necesario puedes incluso solicitar a tu médico de familia algún relajante suave.
