(PD/Agencia EFE).- Un jefe de la policía británica ha originado un debate en el Reino Unido con su llamamiento a prohíbir el consumo de alcohol en la calle y elevar de 18 a 21 años la edad legal para consumir bebidas alcoholicas. Peter Fahy, comisario jefe del condado de Cheshire, pretende así combatir el acoholismo que está en la raíz del creciente «comportamiento antisocial» de muchos jóvenes.
Según Fahy, muchos padres británicos se desentienden de sus hijos, que se dedican a la bebida y aprovechan el hecho de que el alcohol está disponible en cada esquina y a bajo precio.
«El alcohol es demasiado barato y además demasiado fuerte. Y los jóvenes no saben beber», dijo el jefe policial, quien abogó por un mayor control del consumo de bebidas por menores no sólo en los pub sino también en los puntos de venta como supermercados, gasolineras y pequeñas tiendas abiertas por la noche.
Fahy indicó que desea invertir la situación actual, en la que beber en lugares públicos es legal, salvo si los Ayuntamientos adoptan medidas específicas para prohibirlo el consumo en zonas determinadas. «Quería que, en vez de decir ‘está permitido beber, salvo en esas áreas’, las autoridades locales digan ‘vale, en este parque determinado, en este lugar determinado, la gente puede beber'», declaró el policía a la BBC.
La ministra de Interior, Meg Hillier, dijo que no existen proyectos para elevar la edad legal para beber alcohol ni prohibir el consumo en la calle, informa el diario The Guardian. «Si elevamos la edad a 21 años, no impedirá que la gente beba. Sólo demonizará a muchos adultos que beben de manera bastante responsable».
El llamamiento de Fahy se produjo tras la muerte de Garry Newlove, un padre de familia, y la comparecencia ante un tribunal de menores de tres adolescentes -dos de quince años y uno de dieciséis- en relación con ese suceso. Newlove, de 47 años y padre de tres hijos, fue atacado en las proximidades de su domicilio el pasado fin de semana tras afearles la conducta a un grupo de jóvenes que intentaban destruir una excavadora mecánica y murió el domingo en el hospital a consecuencia de una hemorragia.
Tras la detención de los supuestos responsables, el comisario de la policía dijo que no debería existir un tipo de sociedad como la actual del Reino Unido, en la que los adultos tienen miedo de enfrentarse a los jóvenes gamberros. «Todos los padres tienen la responsabilidad de garantizar que logramos erradicar los problemas originados por grupos de jóvenes que intimidan y amenazan a sus vecinos», afirmó Fahy, quien advirtió de que la policía no puede encargarse sola de esa tarea.
«Es ingenuo creer que el problema del comportamiento antisocial de los jóvenes es algo que compete resolver a la policía. Es preciso que tomen también conciencia quienes les venden el alcohol, quienes hacen publicidad de ese tipo de bebidas y los padres que miran para otro lado», agregó el jefe de la policía.
El Reino Unido tiene uno de los peores índices de abuso juvenil de las bebidas alcohólicas de toda Europa, según ha reconocido en un informe el propio Gobierno de Londres, que fija en un 24 por ciento el número de menores de quince años que se emborracharon un mínimo de diez veces durante los últimos doce meses.
El alcohol cuesta actualmente como media un 54% menos que en 1980, y tanto los médicos como varias organizaciones han instado al Gobierno a aumentar el precio de la bebida a la vez que han advertido de que el contenido alcohólico es demasiado alto.
El primer ministro, Gordon Brown, ha ordenado mientras tanto a su Gobierno que revise la legislación que permite a los pub permanecer abiertos día y noche y que ha sido criticada por la oposición conservadora por los daños no sólo a los individuos sino también a las familias.
