(Araceli Oñate).- Mientras la minstra Cabrera prepara un informe PISA made in Spain con los datos cocinados en casa y el Padre Marina de Calcuta pretende sacar tajada, formando también a los padres, en educación para la Ciudadanía, la última encuesta del INE refleja un millón de analfabetos en España y no son, ahora, solamente inmigrantes ó mujeres del mundo rural.
Uno de cada tres jóvenes deja de estudiar antes de tiempo, estamos a la cola de Europa en comprensión lectora y resolución de problemas de matemáticas, uno de cada cuatro alumnos sufre acoso y violencia escolar y desde el Ministerio se reconoce el déficit de la Formación Profesional.
Que la Educación en España es un problema de Estado, es un secreto a voces y que la ministra Cabrera intenta ocultar la realidad con datos cocinados en casa, también.
El fracaso de las políticas educativas de los últimos años, el reparto a manos llenas de subvenciones y recursos y los ineficaces planes de convivencia, están robando a niños y jóvenes el derecho fundamental a aprender en un entorno libre de violencia y privando a los mas desfavorecidos del derecho a la promoción social.
