La Consejería de Enseñanza de la Generalitat incentivará la formación de los padres y madres de alumnos catalanes que no dispongan del título de la ESO –representan un 6,2% de la población de 25 a 34 años–, tras constatar que el nivel de instrucción de las familias afecta al aprendizaje y a las expectativas de los hijos.
En una rueda de prensa sobre la preinscripción escolar para el curso 2015-2016, la consejera de Enseñanza, Irene Rigau, ha dicho que en el momento de la matrícula los centros harán promoción: «Si usted no tiene el graduado escolar haga el camino con su hijo, avancen conjuntamente», ha ejemplificado.
Enseñanza centrará esta promoción en las escuelas de zonas de máxima complejidad, donde esperan que, en un periodo de nueve años equivalente al que dura la etapa Primaria, desaparezca este grupo de adultos sin la ESO, de manera que «se eleve el nivel cultural y formativo» de las familias.
