Seguro que te está dando mucha pereza volver a la rutina y en algunas ocasiones, incluso te llegarás a agobiar con trabajos, exámenes e infinitos proyectos.
Es normal, te entendemos perfectamente… por eso te vamos a contar los mejores trucos para que vuelvas a tener una rutina de estudio ejemplar y consigas el éxito que te mereces en los exámenes:
Buen ambiente
Es fundamental que el espacio donde trabajas esté limpio y ordenado. Antes que nada, ordena tu habitación y elige un buen lugar para poder estudiar. Evita los objetos encima de tu escritorio, así tendrás mayor libertad y evitarás distracciones. Otro dato importante es que tenga buena luz y sea amplio, para evitar posibles agobios…
OFF a las tecnologías
Si necesitas escuchar música para concentrarte, puedes ponerte una lista de música relajante o instrumental lenta para no incitarte a cantar y bailar como una loca. Si no, te recomendamos que lo apagues todo. El móvil es uno de los principales motivos de fracaso académico… Aléjalo de ti y desconecta el wifi si es necesario para evitar que las notificaciones se entremetan en tu rutina. Si tienes televisión, no hace falta que te digamos lo que tienes que hacer con ella…
Utiliza colores llamativos
Varios estudios han demostrado que nuestro cerebro, capta mejor las cosas llamativas que las que no destacan. Por eso un buen truco es subrayar los títulos y las palabras importantes para que las memorices y te las aprendas con mayor rapidez. Puedes usar varios tipos de rotuladores y bolígrafos pero, para crearte unos apuntes de verdadero profesional te recomendamos estos subrayadores, de Stabilo Boss y en tonos pastel. Además de ayudarte a estudiar, ¡harán que te queden unos apuntes dignos de instagramer!
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Recitar en voz alta
Si estás en la biblioteca, no sigas este consejo. Pero, si estás en casa, leer los apuntes en alto o recitar lo que acabas de leer con tus palabras te ayudará muchísimo a memorizar. Si lees sin decirlo, en poco tiempo se te olvidará con facilidad, por eso prueba este truco y comprueba que es 100% eficaz.
Fracciona el tiempo
Aunque no lo parezca, estudiar es cansado tanto para nuestro cerebro, como para nuestra vista, ya que son las partes del cuerpo que más trabajan en esta actividad. Opta por hacer pequeños breaks, incluso puedes plantearte hacer una especie de horario: tras una hora de estudio, 10 min de descanso o merienda y así no te notarás tan cansada y tu jornada de trabajo sea más productiva.
Duerme bien
Este consejo es post-estudio y es que no sirve de nada estar toda la tarde bajo el flexo si luego por la noche apenas descansamos. Quedarnos despiertos hasta tarde solo producirá que, al día siguiente, estemos cansados y nuestro nivel de atención y energía sea prácticamente nulo. Propónte una hora fija para irte a la cama y cumpléla. ¡Notarás los resultados!
Si sigues todos estos tips, este curso va a ser pan comido… ¿Preparada?
Vanesa Soto: @vanesasotog30
Imágenes: Instagram, Giphy y cortesía de las marcas
