Como se decía antes en España de los majaderos como Xavier Ros Otón: ‘muy listo para los logaritmos y que tonto para los recados’.
Es catalán pero vive en Suiza, concretamente en Zúrich. Allí es donde tributa el muy caradura.
En la universidad de esa ciudad helvética imparte clases de matemáticas. Es especialista en ecuaciones derivadas y, por eso, ha obtenido numerosos premios.
Entre ellos, el Princesa de Gerona, este 4 de noviembre de 2019. Y aunque ha sido reconocido con este galardón y no reside en Cataluña, Xavier Ros Oton (Barcelona, 1988) decidió recibir dicho premio con un lazo amarillo en la solapa.
Mientras fuera del Palacio de Congresos de Barcelona se congregaba una turba quemando fotos del Rey y haciendo sonar las cacerolas mientras cantaban «Fora el Borbó», dentro del edificio reinaba la normalidad durante el acto de entrega de los premios de la Fundación Princesa de Girona. Debutaba en este acto la Infanta Leonor.
Los presentes, los que consiguieron entrar, permanecían ajenos a los disturbios de la puerta.
Allí, la única ‘cagada’ fue la de Xavier Ros Oton con su lacito en la solapa, al que algunos abuchearon.