Más información
El propio Newton contó cuando ya era un hombre de avanzada edad, a John Conduitt, su amigo, primer biógrafo y marido de su sobrina, cómo y cuándo tuvo la idea de su teoría de la gravedad.
Al parecer Newton se encontraba reflexionando en el jardín cuando vio caer una manzana de un árbol arrastrada por la fuerza de la gravedad, y se preguntó si sería posible conocer cuál era el poder real de esa fuerza invisible tan poderosa.
El mismo Newton escribió:
«A principios del año 1665 (…) comencé a pensar en la gravedad que se extendía hasta el orbe de la Luna y … deduje que las fuerzas que mantienen a los planetas en sus orbes deben ser recíprocamente como los cuadrados de sus distancias desde los centros alrededor de los cuales giran (…) .Todo esto fue en los dos años de la peste de 1665-1666. Porque en aquellos días estaba en la flor de mi edad para la invención y pensaba en Matemáticas y Filosofía más que nunca».
Se da por sentado que ese momento fue la génesis de la teoría de la gravedad que Newton, con todos los explicativos cálculos matemáticos, publicó posteriormente en su libro Principia Mathematica, que no saldría hasta 20 años después de iniciarlo.
Este momento Eureka, es algo que se repite en muchos descubrimientos y avances científicos, pero muchos discuten si la ciencia dependa sólo de esos momentos, ya que sin los cálculos y el trabajo de fondo, esos momentos no serían más que una simple anécdota.
Según el biógrafo moderno de Newton, Richard Westfall, aunque la idea de Newton era brillante, está seguro que una sola idea no revoluciona ni cambia la ciencia por si sola. Siempre es necesario sistematizar y demostrar las hipótesis que se plantean, mediante el método científico y mucho trabajo.
Hoy en día sabemos que después de 1665, Newton pasó varios años de lucha interior y gran confusión antes de finalmente comprender cómo funcionaba la gravedad, por lo que el momento de la manzana y el árbol, sólo suponen una imagen romántica con la que explicar el inicio de algo mucho más complejo y elaborado.
El Newton mas desconocido:
Poca gente conoce los estudios de Newton sobre la luz, que no fueron tan bien recibidos por la comunidad científica, en concreto por la Real Sociedad, ya que no pudieron reproducir los resultados de las conclusiones del científico, que resultaban muy complicadas.
Newton entró en polémicas con algunos de sus compañeros de la época, incluso llegó a acusar al filósofo alemán Gottfried Leibniz de haberle robado sus ideas.
Otros científicos de la Real Sociedad, como William Stukeley, sentían verdadera inquina por Newton, del que llegó a decir que lo único que había hecho era estar sentado en el jardín de su familia en Woolsthorpe y ver caer una manzana.
Tampoco hay que olvidar sus coqueteos con la Alquimia, el hermético estudio de la naturaleza de la vida y precursora medieval de la química, que pretendía convertir metales no nobles en oro.
También es importante no olvidar que Newton dedicó casi toda su vida al estudio del código secreto que creía contenido en la Biblia, e incluso hay quién cree que lo logró descifrar.
Todos los grandes hombres tienen sus aristas, y Newton no fue menos.
