Califican así de ficción y mentira lo descrito en el libro

“El Código da Vinci muestra un Opus Brown”

* El País publico dos extensos artículos sobre el Opus Dei aue muestras la campaña de transparencia que La Obra parece haber emprendido en los últimos tiempos.

Las informaciones son generadas por motivos a los que somos ajenos, como son las referencias que en la novela se hacen al Opus Dei. En realidad se trataría de un Opus’ Brown, ya que la realidad del Opus Dei no tiene nada que ver con la mezcla de ficción y mentira que se muestran en una novela que falsea la persona de Cristo y la Iglesia. Por nuestra parte no hay campaña: si plena disponibilidad para informar.

* ¿Tienen ahora mismo alguna política o filosofía concreta en su relación con los medios?

Lo importante es tener clara tu propia identidad, actuar con coherencia y honradez. Vivir y estar en el mundo incluye necesariamente procurar hacer las cosas bien y esto supone cuidar la imagen, que, a pesar de su importancia, es secundaria. Actitud de comunicación y transparencia: no hay nada que ocultar y mucho que explicar, enseñar, hablar y hablar, dialogar siempre, aprender de las quejas, de las críticas.

* Ustedes afirmaron que “El éxito de Dan Brown va a tenernos ocupados mucho tiempo. ¿Aprovechan que se les mencione tan directamente para ratificar la imagen de transparencia que tiene la obra?

Esta historia que nos ocupa es bastante desagradable, porque ataca puntos que considero claves en la vida de millones de personas. Creo que no es bueno ofender, que el fin no justifica los medios, que hay un derecho a la buena fama, a la información veraz, compatible con la libertad artística o de expresión. Nos está dando trabajo, el de responder a peticiones de los medios informativos y de los ciudadanos que tienen dudas.

* A lo largo de mucho tiempo existía, y tal vez exista, cuando se percibe desde fuera, una imagen negativa del Opus Dei. ¿Dónde cree que nace esa imagen? ¿Los medios de comunicación han tenido, en el pasado, parte de responsabilidad?

Afortunadamente hay muchísima gente en todo el mundo que ama y aprecia la Iglesia y sus instituciones, entre ellas el Opus Dei. La percepción negativa existe y obedece a factores muy variados: nuestros propios errores, la falta de buenas explicaderas, la originalidad del Opus Dei, una cultura religiosa a veces deficiente, etc. Por su parte, los medios de comunicación reflejan cada vez mejor la realidad del Opus Dei: dar formación cristiana, sensibilizar, alentar soluciones desde la libertad de cada uno…y esto es para muchos algo muy positivo y de agradecer.

* En este sentido, ¿no cree que una vez que alguien se forma una imagen negativa de algo, es muy difícil convencer a la persona de lo contrario?

No se trata de convencer a nadie, mejor proponer, plantear las cosas pacíficamente: es cuestión de que conozca en directo, que pise tierra, que no se limite a teorías, a un bla, bla, bla estéril.

* El poder de los medios de comunicación digitales, con lo representa Internet como herramienta poco controlable, ¿está más cerca de fortalecer lazos de comunicación o de un peligro para la sana información que ha de recibir la sociedad?

Me resulta difícil buscar los calificativos más expresivos para destacar la maravilla que suponen estos medios digitales e Internet. Su trascendencia refuerza la necesidad de actitudes exigibles a los medios y a los profesionales: rigor, búsqueda de la veracidad, combatir el anonimato, huir del riesgo de ser cauce de rumores, ataques injustificados, etc.

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