(PD/Agencias).- Coca–Cola no se queda atrás en la defensa del medio ambiente y se ha comprometido a restituir a la naturaleza «cada gota» de agua que utiliza para la elaboración de sus productos.
El objetivo de la multinacional es proteger siete de las grandes cuencas ribereñas del mundo, entre ellas las del Yangtsé y las de los ríos Bravo y Grande, mediante un programa con el grupo ecologista WWF.
«Nuestra meta es restituir cada gota de agua empleada en nuestras bebidas y en su producción. Esto significa reducir la cantidad de agua que utilizamos, reciclar el agua usada en la fabricación y devolver el agua a las comunidades y a la naturaleza», dijo en Pekín el presidente de la multinacional, Neville Isdell.
El proyecto fue anunciado coincidiendo con el Día Internacional del Medio Ambiente y la primera jornada de la reunión anual de WWF (Fondo Mundial para la Fauna y Flora Silvestres), que se celebrará hasta el día 8 en Pekín, con la asistencia del ex secretario general de la ONU Kofi Annan.
Según explicó Neville, el 40% del agua que utiliza la compañía (290.000 millones de litros en 2006) va a parar a las bebidas y el resto a los procesos productivos, entre ellos, limpieza, calefacción y enfriamiento.
A través del programa, la multinacional y WWF trabajarán para mejorar la eficiencia en el uso del agua en toda la cadena productiva de la compañía, comenzando con la caña de azúcar.
No obstante, dijo el directivo, la cuestión de la caña de azúcar también tiene que ver con las políticas agrícolas.
«El uso incorrecto del agua no es algo que nosotros solos podamos resolver, depende de los gobiernos, pero alzaremos nuestra voz» para animar a los productores a ahorrar agua, dijo el directivo, quien explicó que la compañía está buscando además alternativas.
«Por cada litro de Coca-Cola, el azúcar que contiene, necesita entre 175 y 200 litros de agua. Este es el gran problema», afirmó Jason Clay, de WWF.
Coca-Cola se compromete también en el programa, que financiará con 20 millones de dólares (15 millones de euros), a adoptar medidas para reducir sus emisiones de CO2 durante la fabricación de sus bebidas.
En el acto, el presidente de WWF, Carter Roberts, recordó que sólo el 3 por ciento del agua del planeta es potable, de la cual dos tercios están congelados y el tercio restante nutre la vida natural.
«De ese tercio, el 70 por ciento se utiliza en la producción de alimentos, el 22 por ciento en procesos de fabricación y energéticos y el resto en bebida y saneamiento», subrayó.
Coca-Cola es la bebida más consumida en China, país que se enfrenta a una grave crisis hídrica, con la mayoría de sus fuentes contaminadas y 400 de sus 660 principales ciudades afectadas por déficit de agua.
