(PD/EFE).- Cenar esta Nochebuena entremeses de cerdo ibérico criado en dehesas ecológicas o disfrutar de una producción natural en cavas y turrones son las propuestas que la feria Biocultura propone para hacer de estas fechas unas «fiestas sostenibles».
El Pabellón de Cristal de la madrileña Casa de Campo acogerá, del 22 al 25 de noviembre, las propuestas y novedades en el ámbito de la alimentación ecológica y el consumo responsable, en unos 3.500 metros cuadrados de superficie de stands.
Biocultura, que este año celebra su XXIII edición, mostrará nuevos patrones de consumo «más sanos» en unas fechas que se suelen caracterizar por los excesos alimentarios y el gasto desenfrenado.
Montserrat Escutia, coordinadora del departamento técnico de Vida Sana, ha explicado a que «por un poco más de dinero los consumidores pueden disfrutar, tanto en Navidad como el resto del año, de productos de mayor calidad», con el total convencimiento de que no están dañando el medio ambiente.
Carnes, pescados, vegetales, dulces… La alimentación sana ha superado, según Escutia, el estereotipo de «vegetariano raro» y ofrece una amplia variedad de productos y precios para un amplio sector de la población.
Con motivo de las cercanas celebraciones navideñas, Biocultura también ha destacado la posibilidad de regalar a los niños «juguetes ecológicos», hechos con maderas nobles y pintados a mano con pinturas que no tengan agentes tóxicos.
La portavoz ha reconocido que los productos ecológicos son más caros que los del mercado habitual, pero, en su opinión «la alimentación sana y libre de fertilizantes debería ser una prioridad para la población».
