(PD / BBC MUNDO)-. California demandará al gobierno federal de Estados Unidos para obligar fabricantes de coches que acepten limitaciones más drásticas en las emisiones de gases de efecto invernadero.
La demanda contra la Agencia de Protección Medioambiental (EPA) llega después de que este organismo federal no permitiera al estado californiano imponer sus propias medidas para reducir la contaminación.
California aprobó en 2002 una ley que exige a los fabricantes la reducción de las emisiones de gases contaminantes de los vehículos en un 30% para 2016, pero para hacerla efectiva necesitaba el visto bueno de la EPA.
El ente federal afirma que quiere evitar un mosaico confuso de reglamentos distintos en el país, pero California la acusa de no «hacer nada» para impedir el efecto invernadero.
Otros 15 estados u organismos estatales estadounidenses apoyarán la demanda californiana, incluyendo Nueva York y Massachussets.
California asegura que está haciendo frente a consecuencias peligrosas del calentamiento global, supuestamente provocado en parte por los gases contaminantes emitidos por los escapes de los automóviles.
Entre las consecuencias figura el derretimiento de la capa de nieve de las montañas que aporta un tercio del agua que se consume en el estado, además de la amenaza que se cierne sobre cientos de kilómetros de su costa amenazados por el aumento de los niveles del mar.
El fiscal general de California, Jerry Brown, explica que
La EPA no ha hecho nada a nivel nacional para controlar la emisión de gases contaminantes y ahora han bloqueado injusta e ilegalmente las medidas propuestas por California sobre los estándares de la emisiones, a pesar del hecho de que 16 Estados buscan adoptarlas.
La EPA se defiende al afirmar que la legislación aprobada en diciembre por George W. Bush proporciona una manera más efectiva para reducir los gases invernadero que las distintas reglamentaciones estatales.
