Las organizaciones ecologistas se «esperaban» el que han calificado de «drástico recorte» del 31,3 por ciento en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2011 del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) que califican de un «abandono de las políticas medioambientales».
En declaraciones a Europa Press, el secretario general de WWF, Juan Carlos del Olmo, considera que esta reducción supone «un retroceso» que es «inconsistente con el objetivo anunciado al principio de la legislatura» del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
«Un recorte no tendría por qué afectar al medio ambiente, siempre y cuando se eliminaran o redujeran las partidas para obras e infraestructuras hidráulicas innecesarias o las subvenciones a la agricultura y pesca intensiva», ha destacado.
En la misma línea, la responsable de Amigos de la Tierra, Liliane Spendeler, valora que el recorte es «un reflejo más del poco interés del Gobierno por el Medio Ambiente», una «tendencia» que en su opinión se produce desde «hace un par de años, cuando cada vez hay menos interés en las políticas medioambientales, justo cuando, en este contexto habría que hacer lo contrario».
MEDIO AMBIENTE ACCESORIO
Para el coordinador de Ecologistas en Acción, Luis González Reyes, se trata de «un tremendo error porque el medio ambiente no es algo accesorio sino que está en el centro la crisis actual» porque tiene «mucho que ver con los recursos que se están agotando o con el cambio climático».
«Lo que necesitamos es reconducir los presupuestos planteados para que se invierta en lo que realmente hace falta para salir de una crisis profunda de corte ambiental», ha recalcado, al tiempo que reconoce que «desgraciadamente» para Ecologistas en Acción la reducción presupuestaria «no es ninguna sorpresa» porque, a su juicio, el Gobierno «se ha venido caracterizando por los recortes en lo social y lo ambiental».
Sin embargo el coordinador de campañas y director ejecutivo interino de Greenpeace, Mario Rodríguez, no se lo esperaba porque la organización pensaba que lo ambiental estaba al margen de la crisis, ya que Medio Ambiente «siempre ha tenido un presupuesto muy bajo» y ha calificado la reducción de «señal muy negativa». «Esto es un golpe de gracia, un jarro de agua fría, porque no esperábamos un recorte ni tan drástico ni de este calibre. Es excesivo y deja bajo mínimos la política medioambiental», ha sentenciado.
Por su parte, el director de la recién creada Fundación Equo, Juan López de Uralde, señala que el recorte es «bastante indicativo de las políticas del Gobierno» y que «da la razón a los grupos ecologistas de que las políticas ambientales están en derribo en el Gobierno de ‘ZP'», del que ha dicho que «demuestra falta de voluntad para acometer políticas avanzadas» sobre todo en lo «verdaderamente medioambiental».
En todo caso, a ‘Juantxo’ tampoco le «sorprenden» las rebajas porque «ya viene sucediendo desde que Medio Ambiente dejó de ser Medio Ambiente», lo que, en su opinión, «viene a corroborar que no son decisiones que se hayan tomado por sorpresa sino con premeditación». «Se trata de una tendencia que empezó en 2008 y detrás de la cual hay un abandono de las políticas ambientales que llevamos denunciando tanto tiempo denunciando», ha lamentado porque ve «muy difícil» que se pueda conseguir algún cambio.
