Ecologistas en Acción denunció este sábado que el pescado español sigue conteniendo más mercurio del permitido, lo que supone un peligro para la salud, ya que, según la ONG, la ingesta de «cantidades relativamente despreciables» de este metal por parte de embarazadas «puede producir serios retrasos motores o de comunicación».
Según afirmó la ONG verde, filetes de pez espada procedentes de España alcanzaron el año pasado valores de hasta 4,06 miligramos de mercurio por kilogramo de pescado, pese a que la normativa comunitaria permite como nivel máximo de este metal en los productos pesqueros 0,5 miligramos por kilo.
No obstante, en ciertas especies, como el pez espada, el tiburón o el atún, el nivel máximo permitido es más alto, de un miligramo por kilo.
El mercurio, señala Ecologistas en Acción, es un metal «extremadamente volátil» que se puede transportar a grandes distancias una vez que se ha emitido a la atmósfera. Depositado en un ambiente acuático, este metal se transforma en metilmercurio, «una potente neurotoxina» que se acumula en los peces y en los humanos que la consumen.
Cuando lo ingieren mujeres embarazadas, el metilmercurio atraviesa la placenta y se acumula en el cerebro y el sistema nervioso central del feto en desarrollo. «Incluso cantidades relativamente despreciables pueden producir serios retrasos motores o de comunicación», reitera la ONG.
Además, alerta, «el mercurio nunca desaparece del medio ambiente, asegurando que la contaminación de hoy seguirá siendo un problema en el futuro».
Aunque el año pasado disminuyeron «ligeramente» las notificaciones por contaminación con metales pesados, la presencia de mercurio sigue siendo la principal fuente de notificaciones en el pescado y otros productos pesqueros.
Para Ecologistas, los límites permitidos por la UE de mercurio en pescado no protegen suficientemente la salud, al no tener en cuenta el consumo medio, ni las características corporales de los consumidores.
