El primer ministro japonés visita por primera vez las zonas devastadas, mientras Japón y EE UU despliegan 24.000 soldados para buscar a los desaparecidos
Los técnicos de Tepco siguen trabajando sin descanso en Fukushima para evitar que se agrave aún más la situación que vive la central pero la solución parece quedar aún muy lejos.
La operadora de la planta nuclear ha localizado una grita en el reactor número 2 por donde se está filtrando agua altamente radiactiva al mar.
El nivel de radiactividad del pozo de filtración es de 1.000 milisieverts por hora, una cantidad suficiente como para incrementar las posibilidades de contraer cáncer a largo plazo en el caso de una exposición prolongada.
Como primera medida de contención, TEPCO ha anunciado que procederá inmediatamente a rellenar la fisura con cemento para detener el vertido.
LA FILTRACIÓN
El líquido se filtra a través de una grieta de unos 20 centímetros en el muro de una fosa próxima al reactor, en la que hay agua contaminada con una profundidad de entre 10 y 20 centímetros.
Tras detectar la grieta y a fin de contener la filtración, los operarios que trabajan en Fukushima se preparan para verter cemento en ese lugar, situado cerca de la toma de agua del reactor 2 y donde se encuentran varios cables eléctricos, según NHK.
Las fuentes de Tepco indicaron que en ese lugar los niveles de radiactividad han alcanzado más de 1.000 milisievert por hora.
La operadora investiga si hay otras filtraciones de agua radiactiva al Océano Pacífico, después de que en los últimos días se hayan detectado en las aguas costeras próximas a la planta nuclear Fukushima niveles de radiactividad muy superiores a los límites legales.
Las operaciones para contener la filtración se suman a los esfuerzos para drenar los charcos de agua altamente radiactiva en varias zonas de las unidades 1, 2 y 3, que dificultan las tareas para restaurar la refrigeración de los reactores.
Ésta se convirtió en el foco de la crisis nuclear que vive Japón desde que el tsunami que siguió al seísmo del pasado 11 de marzo dañó sus generadores de emergencia, lo que paralizó el sistema general de refrigeración.
EL PRIMER MINISTRO EN LA ZONA
En las zonas devastadas por el terremoto y el tsunami siguen las tareas de búsqueda de cadáveres y reconstrucción de las poblaciones arrasadas por la tragedia.
Este 2 de abril de 2011, el primer ministro, Naoto Kan, ha visitado por primera vez una de las poblaciones más afectadas por el tsunami.
Kan se ha desplazado hasta Rikuzentakata, una localidad de unos 25.000 habitantes, donde se reunió con los evacuados para transmitirles el respaldo del Gobierno nipón.