Noruega se vistió de gala para celebrar que sus futuros monarcas llevan una década enamorados y que pese a todo, ha triunfado el amor y hoy son una familia feliz. La pareja quiso celebrar una gran fiesta a la que no faltaron representantes de otras casas reales como Victoria y Daniel de Suecia que serán padres por primera vez.
La ceremonia fue oficiada en la Catedral de Oslo y oficiada por el obispo emérito, el mismo que ofició su enlace. El obispo elogió a la pareja por «no tener miedo a mostrar que el amor se ha mantenido a lo largo de diez años».
Después de todo este tiempo sus vidas han cambiado mucho, en especial la de la princesa ya que tuvo que enfrentarse a una nueva realidad en medio de un ambiente de críticas hacia ella por culpa de su oscuro pasado.
Tan enamorados como siempre, Haakon y Mette- Marit son felices junto a sus dos hijos, Ingrid Alexandra de 7 años, Sverre Magnus de 5 y Marius de 14, fruto de una anterior relación de la princesa.
Con la ayuda de los suyos y gracias a su carácter y su cercanía no solamente acallar las críticas que vertían contra ella sino además ganarse un hueco en los corazones de los noruegos.
En un día tan feliz no faltó una inmejorable compañía de la mano de familia, amigos, representantes de otras Casas Reales como los Príncipes de Suecia e incluso del gobierno noruego con el Primer Ministro, Jens Stoltenberg a la cabeza.
