La sequía es un problema mundial que va en aumento: para 2025 preven que dos tercios de la población vivan amenazados por la escasez de agua…a no ser que la tecnología logre frenarlo, según recoge Christiane Drummond en ticbeat.
La empresa estadounidense Weather Modification International desarrolla un sistema para provocar lluvia y paliar la sequía. Basado en el concepto “siembra de nubes”, la compañía lo define como un “mejor aprovechamiento” del proceso natural de precipitaciones.
Básicamente, su tecnología hace que las tormentas sean más eficientes sacando más humedad de las nubes. Para ello, un piloto esparce pequeñas cantidades de un gas noble – yoduro de plata – en las nubes con más humedad. Esto provoca que el agua en las nubes se condense alrededor de las nuevas partículas y pese más, cayendo al suelo en forma de precipitaciones.
Pese a ser una buena solución, la siembra de nubes también genera algunos problemas. Por ejemplo, podría haber disputas entre localidades adyacentes sobre a quién le pertenece el agua de determinadas nubes. Así, también cabe preguntarse el impacto a largo plazo de introducir yoduro de plata en el entorno para el medio ambiente.
Tampoco se trata de la solución definitiva a la sequía: cuidar el medio ambiente es fundamental para combatir el problema inicial. No obstante, si marca una diferencia y podría plantearse como un sistema interesante para combatir cierta sequía.
