Se fue de vacaciones a Bali tras una operación de apendicitis, y casi no lo cuenta. Y todo por culpa de una ‘araña invasora’ que se le metió bajo la piel a través de los puntos de sutura.
Dylan Thomás, de 21 años, australiano él, se despertó una infortunada mañana en la habitación de su hotel de 4 estrellas, con un escozor insufrible. Tras observar su piel se percató de una roncha rojiza que subía rumbo a su estómago, tal y como ha dado cuenta a ‘NT News‘.
PARA ARRIBA Y SIN PARAR
Más tarde, ese mismo día, la mancha había subido un par de centímetros hacia el tórax. Ni corto ni perezoso salió como alma que lleva el diablo rumbo al hospital más cercano.
Allí, tras varios exámenes, los doctores de turno le extirparon una pequeña araña tropical, no sin antes haberle recetado una pomada ya que pensaban que se trataba de una simple picadura.»
«Fue una experiencia muy extraña saber que tuve algo dentro de mi cuerpo durante un par de días. No me había sentido tan violado en mi vida antes. Menos mal que todo ha terminado».