Cuando Dave Du Toit vio la escena, creyó al principio que lo que tenía delante de los ojos no era más que un gran palo en el suelo.
Solo momentos después se dio cuenta de que aquel ‘palo’ eran en realidad dos cobras escupidoras enzarzadas en una feroz pelea que había quedado en tablas.
Las dos serpientes se mordían mutuamente las mandíbulas y se retorcían en el suelo, quedando en algún momento boca arriba a causa de la virulencia de los envites, informa Daily Mail.
LA SERPIENTE COBRA
La cobra real, una de las serpientes más venenosas del planeta.
Puede literalmente «ponerse de pie» y mirar a los ojos a una persona adulta.
Cuando se enfrentan, pueden levantar hasta un tercio de su cuerpo del suelo y seguir adelante para atacar.
Afortunadamente, las cobras reales son tímidas y evitarán a los humanos siempre que sea posible.
También encenderá su icónica capucha y emitirá un silbido que suena casi como un perro gruñendo.
Las cobras reales pueden alcanzar los seis metros de largo.
Veneno
Su veneno no es el más potente entre las serpientes venenosas, pero la cantidad de neurotoxina que pueden administrar en una sola mordida (hasta dos décimas de onza líquida) es suficiente para matar a 20 personas, o incluso a un elefante.
El veneno de la cobra real afecta los centros respiratorios del cerebro, causando paro respiratorio e insuficiencia cardíaca.
Hábitat y comportamiento
Las cobras reales viven principalmente en las selvas tropicales y las llanuras de la India, el sur de China y el sudeste asiático, y su color puede variar mucho de una región a otra.
Se sienten cómodos en una variedad de hábitats, incluidos bosques, matorrales de bambú, manglares, praderas de gran altitud y ríos.
Esta especie se alimenta principalmente de otras serpientes, venenosas y no venenosas.
También comerán lagartijas, huevos y pequeños mamíferos. Son las únicas serpientes en el mundo que construyen nidos para sus huevos, que protegen con ferocidad hasta que emergen las crías.
Encantadores de serpientes
Las cobras reales pueden ser mejor conocidas como las especies preferidas por los encantadores de serpientes del sur de Asia.
Aunque las cobras pueden escuchar, en realidad son sordas a los ruidos ambientales, en su lugar perciben las vibraciones del suelo.
El encantamiento de serpientes es «a menudo un juego triste en el que una cobra exhausta se pone a la defensiva, pero a la vez está condicionada (con dolor) para no golpear al flautista», dice el Zoológico Nacional del Smithsonian.
Amenazas a la supervivencia.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza ha catalogado a la cobra real como vulnerable a la extinción.
Estas serpientes enfrentan una variedad de amenazas derivadas de las actividades humanas.
La fuerte deforestación en el sudeste asiático ha destruido los hábitats de muchas cobras reales, mientras que también se cosechan en grandes cantidades con fines de piel, alimentos y medicinales. También se recogen para el comercio internacional de mascotas.
Las cobras reales también son perseguidas por humanos que temen su amenazante reputación.
