Un beso maternal por confusión acaba siendo el beso de la muerte.
Todo, cuando este guepardo confundió una cría de gacela con su cachorro, y tras lamerlo por confusión, se percató de que era una gacela y acabó comiéndosela.
El espanto fue captado por Federico Veronesi, fotógrafo de vida salvaje y guía de safaris, en la Reserva Nacional de Masai Mara, Kenia.
La gacela se acercó al momento de nacer al guepardo, ignorante del peligro que eso suponía.
Y el guepardo, sin darse cuenta de entrada, con su instinto maternal lamió a la cría con ternura.
Unos segundos, porqu acto seguido se activó su instinto depredador y acabó con la corta vida del animalito.
Veronesi ha señalado:
“Hemos sido testigos de un lado de la psicología del guepardo que no aparece con frecuencia: el lado materno y la aparente compasión por su presa. Lo sorprendente es cómo persistió el instinto del bebé de levantarse y acercarse a su madre para amamantar, a pesar de que la madre había sido reemplazada por el depredador. Este comportamiento inusual del pequeño cervatillo parecía haber causado los instintos maternos del guepardo, a pesar de que el bebé no era de su propia especie”.
Cheetah mistakes gazelle for one of its own cubs before killing it https://t.co/wNoK290Kfp
— Daily Mail Online (@MailOnline) January 3, 2020
Comentar desde Facebook