(BBC Mundo).- Los habitantes de la localidad colombiana de Tuluá deberán llevar consigo preservativos, igual que portan sus documentos de identidad, o enfrentarse a una multa, si prospera la propuesta de su Gobierno municipal, para frenar las enfermedades de transmisión sexual, según informa la BBC citando al diario Tiempo de Bogotá.
La Iglesia, encabezada por el padre Jesús Velásquez, se ha llevado las manos a la cabeza ante la «absurda medida» pero las autoridades locales han recordado que el año pasado el sida y otras enfermedades acabaron con la vida de 14 personas en la localidad.
El concejal William Peña, gestor de la propuesta, le explicó a BBC Mundo que «los ciudadanos mayores de catorce años, sean hombres o mujeres y cualquier ciudadano que esté de paso, debe portar el condón y si no lo hace deberá pagar un salario mínimo legal diario».
La multa para los infractores sería de cerca de US$5.
La iniciativa de Peña contempla que el gobierno municipal disponga en «lugares clave» dispensadores de condones, los que serían gratis para los distritos pobres.
Peña opinaque las campañas para encarar la enfermedad no son efectivas tal y como están planteadas.
«Están invitando al uso del condón, pero no invitan a que lo porten, es más positivo cuando se impone que cuando se invita».
Los jóvenes en esa localidad empiezan a tener relaciones sexuales a los quince años de acuerdo con una encuesta.
DIFERENCIAS
Algunos padres de familia se oponen a la iniciativa.
«Yo les diría a los padres que deben enseñar a sus hijos a que hacer el amor sin condón es como colocarse un revolver 38 corto en la cabeza y jugar a la ruleta rusa», señaló el concejal.
El proyecto del edil ha causado airadas reacciones de la iglesia católica en Colombia.
«Han dicho que mi propuesta es como vender armas en la calle. La iglesia católica dice que el suicidio es un pecado y yo le digo que hacer el amor sin condón es un suicidio», apuntó.
Peña agrega que, «si la iglesia dice que portar condones es pecado entonces están empujando a los jóvenes a que se suiciden», dijo.
El párroco local, Jesús Velásquez, indicó que se opondrá al proyecto.
Según un estudio, Tuluá es la población con mayor número de infectados de SIDA en el departamento del Valle.
EL concejal Peña dijo que en el mes de diciembre se realizaron pruebas a 500 personas y 16 resultaron infectadas con el virus del VIH.
«En Tuluá hay más de 200.000 habitantes, calcule usted la gravedad del problema», advirtió.
El proyecto será discutido en la asamblea municipal en febrero y si es aprobado se empezará a implementar en marzo.
