El consumo de cocaína en España ya multiplica por cinco la media de la UE

El consumo de drogas se ha disparado en España, sobre todo en dos de las sustancias que más éxito tienen entre la población. Nuestro país se ha convertido en el segundo del mundo donde más personas han consumido cocaína.

En 2003, lo hicieron casi tres de cada cien españoles (2,7 por ciento), una cifra sólo superada por Estados Unidos (2,8 por ciento). Pero es que esos inquietantes datos no mejoran cuando se trata de analizar la tendencia que sigue el cannabis: también España es el país europeo donde se registra un mayor número de adeptos.

Así lo revela el Informe Mundial de las Drogas 2006, que presentó ayer la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. Ante las cifras tan preocupantes que muestra el documento, este organismo hizo una seria llamada de atención a los gobiernos de la Unión Europea por el aumento que está experimentando el consumo de cocaína en el viejo continente, ya que «está creciendo hasta niveles alarmantes».

Hoy día, 3,5 millones de europeos han utilizado esa sustancia, lo que representa el 26 por ciento del total de consumidores que existen en el mundo. El informe, incluso, pone el acento en el caso de España, porque quintuplica la media europea: mientras que el 2,7 por ciento de los españoles han probado al menos una vez la cocaína en el último año, en Europa sólo lo ha hecho el 0,5 de la población.

Frente a este panorama, no es de extrañar que la ONU advierta a los gobiernos de que no hay que «ignorar este peligro», ya que «demasiados profesionales europeos usan cocaína muchas veces negando su adicción». Pero el problema tiene consecuencias mucho más preocupantes, pues «el abuso por parte de algunas celebridades es comentado en los medios de comunicación sin ningún tipo de críticas, lo que deja a los jóvenes confundidos y vulnerables».

Producción estable
La cocaína avanza, y no sólo en la captación de seguidores. Aunque la ONU señala que existen tendencias «alentadoras», porque el cultivo de la hoja de coca permanece estable en los países suramericanos, lo cierto es que en 2003 aumentó su producción (por primera vez en cuatro años) en Colombia en un 7 por ciento.

No ocurrió así en Perú, que registró un descenso del 4 por ciento, y en Bolivia, donde disminuyó un 8 por ciento.

Lo que también parece ofrecer resultados esperanzadores es el aumento de las incautaciones realizadas en 2004. Se decomisaron a escala mundial 588 toneladas de cocaína, un 18 por ciento más que en 2003. A la cabeza se encontraba Colombia, seguida por Estados Unidos.

Mientras la cocaína va alcanzando cada vez más éxito, el cannabis se mantiene como la droga más utilizada en el mundo y su consumo sigue creciendo sin parar. Hoy día, cuenta con 162 millones de adeptos (un 4 por ciento de la población mundial).

Y esa tendencia global también tiene su reflejo en nuestro país, que se ha situado a la cabeza de Europa en este tipo de consumo. En 2003, un 11,3 por ciento de los españoles utilizaron esa sustancia, como mínimo, una vez en los doce últimos meses.

La ONU critica en su informe la gran aceptación de que disfruta el cannabis en todo el mundo. No se la puede considerar una «droga blanda y relativamente inofensiva»; si cabe, es hoy «considerablemente más potente» que antes. Por ello «requiere, al igual que otras amenazas contra la salud pública, un consenso y un compromiso consistentes a través del espectro político y de la sociedad».

Aumentan las incautaciones
Al igual que ha ocurrido con la cocaína, también aumentaron las incautaciones de resina de cannabis: un 6 por ciento en 2004. España fue el país donde más se decomisó esa sustancia, en total 797.437 kilogramos, lo que supone un 54 por ciento de todas las incautaciones efectuadas a nivel mundial.

También, el principal productor de esta sustancia, Marruecos, logró disminuir su cultivo en un 40 por ciento.

El revelador informe de la ONU insta a todos los países a no bajar la guardia ante el peligro que suponen las drogas, y advierte de que muchos estados no se toman el problema «suficientemente en serio».

En su opinión, incluso, «muchos países tienen el problema de drogas que se merecen», aunque ya se ha demostrado que después de años de lucha contra las drogas «una estrategia coherente y a largo plazo puede reducir la oferta, la demanda y el tráfico».

No obstante, el informe pide a los gobiernos que trabajen más para disminuir la demanda de esas sustancias y, en particular, del cannabis y las anfetaminas. Además, reclama la necesidad urgente de prevenir la extensión del sida entre los consumidores de las drogas inyectables.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído