La titular de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, ha negado que tenga intención de catalogar el vino como «bebida alcohólica peligrosa» en la ley que prepara su ministerio para prevenir el consumo de alcohol entre los menores, asegurando que no sabe de dónde ha salido una «historia» que «no ha mencionado ni está en su cabeza mencionar».
A preguntas de representantes del Grupo Parlamentario Popular durante su comparecencia ante la Comisión de Sanidad del Senado, la ministra quiso lanzar un mensaje de «tranquilidad» y negó que quiera emprender una campaña «ni agresiva ni no agresiva» contra el vino. Reconoció, además, que, a día de hoy, aún no sabe:
«De dónde salió la historia del vino. Llevo varios días intentando dar respuesta a algo que en ningún momento he mencionado ni está en mi cabeza mencionarlo».
INFORMACIONES PUBLICADAS
Las informaciones al respecto recogidas por diversas medios se referían a las reacciones del sector vitivinícola, de las comunidades autónomas productoras de vino e, incluso, del ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, quienes se habían manifestado temerosos de que la futura ley de prevención del alcoholismo en menores causara un perjuicio a esta bebida tradicional.
TEMORES DE PRODUCTORES DE VINO
Los críticos con esta ley aducían que el ministerio podría prohibir a las bodegas utilizar sus marcas comerciales para el patrocinio de actividades, la venta de otros productos -como aceites o vinagres- o la promoción de emplazamientos turísticos, como ocurre ahora con el tabaco.
