(PD / EP).- La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) presentó este martes el informe Barreras de Acceso al Paciente de los Fármacos Oncológicos donde puso de manifiesto la «falta de equidad» existente en las comunidades autónomas con respecto al acceso de los pacientes a los tratamientos antineoplásicos y a los fármacos oncológicos innovadores.
La causante de estas desigualdades sería la política de restricción del gasto farmacéutico, que está perjudicando en espacial y seriamente a los enfermos de cáncer. Alfredo Carrato, presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica, puso sobre la mesa la situación y afirmó que no todos los pacientes tienen acceso a las nuevas terapias, porque no todos los gobiernos autonómicos están dispuestos a pagar el coste de ciertos medicamentos.
El informe revela que no todos los enfermos de cáncer pueden acceder hoy en España a los mejores tratamientos disponibles en el mercado, porque existen barreras normativas, económicas, científicas y operativas que lo impiden: desde distintas políticas autonómicas en materia de medicamentos a restricciones presupuestarias que limitan las compras.
Además de una burocracia que hace interminables los trámites que hay que realizar desde el momento en que un fármaco es autorizado por la Agencia Europea del Medicamento hasta que empieza a utilizarse en España.
Carrato aunque no precisó la media de prescripciones ni las comunidades más o menos afectadas «por razones de respeto», Carreto aseguró que algunas como Madrid, Cataluña y Comunidad Valenciana están por encima de la media nacional en cuanto a prescripción de fármacos oncológicos, mientras que otras como Canarias, Andalucía o Castilla-La Mancha presentan «más escasez de recursos y cifras por debajo de la media».
Del mismo modo, este experto afirmó que España ha perdido la posición «privilegiada» con la que contaba con respecto al resto de países europeos en el acceso y la prescripción de nuevos tratamientos, mientras que otros países como Francia han mejorado su sistema desde que cuentan con un presupuesto diferenciado asignado a medicamentos innovadores, lo que permite un acceso «más directo» a los pacientes.
Entre otras barreras normativas, el informe destaca que la nueva Ley del Medicamento hace «más restrictivos» los criterios de selección de los medicamentos a efectos de su financiación, al tiempo que la incentivación de la prescripción por principio activo y la implantación de la receta electrónica va a afectar «mínimamente», ya que en el caso del cáncer no existe un volumen de fármacos oncológicos genéricos como en otras patologías.
