(PD/Agencias).- Cantar puede ser la cura de distintos males. A esa conclusión ha llegado un grupo de médicos y psicoterapeutas de la Universidad de Viena que asegura que levantar la voz, ser escuchado y reconocido es de importancia vital para un ser eminentemente comunicativo como es el ser humano.
Los especialistas empiezan a estudiar los beneficios de elevar la voz. La doctora y psicoterapeuta Gertraud Berka-Schmid ha afirmado en la revista especializada Medizin Popular Berka-Schmid que cantar debería ser una práctica recetada.
«Cantar es la respiración estructurada», ha indicado la experta, que explica que el efecto fisiológico que prevalece cuando uno canta se convierte en un masaje para el intestino y en un alivio para el corazón.
Además, ha asegurado, esa respiración suministra aire adicional a los alvéolos pulmonares, impulsa la circulación sanguínea y puede mejorar la concentración y la memoria.
También ha detallado que se trata de un remedio óptimo para equilibrar el sistema vegetativo y refuerza la actividad de los nervios parasimpáticos que aportan tranquilidad y relax, frente a trastornos de sueño.
A través de la voz, uno es capaz de expresar las impresiones que le invaden continuamente, de tal forma que el sujeto puede deshacerse de una serie de sensaciones. A veces no es posible hacerlo hablando normalmente y ahí el canto desempeña un papel esencial, como ocurre con las canciones fúnebres.
El cantar aporta una vivificación de la zona de la pelvis y funciona de forma automática, ha asegurado Berka-Schmid.
En la práctica, se ha visto que enfermos de Alzheimer, gracias a una canción conocida, han recuperado algún recuerdo o que personas que han sufrido una apoplejía pudieron volver a hablar a través del canto, según ha recordado la especialista.
