(PD).- El ministro de Sanidad, Bernat Soria, define los retos de su departamento para esta nueva legislatura y la Farmacia es protagonista de muchos de ellos. Hasta el punto de que ocupó buena parte de su comparecencia de la semana pasada ante la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados.
Explica Rosario García del Río en Correo Farmacéutico que el ministro habló del modelo, de un segundo plan estratégico de política farmacéutica, de desarrollo de la Ley de Garantías, de formación de profesionales, de financiación sanitaria, de gasto en medicamentos, de distribución, de industria, de innovación y de estrategia contra la falsificación de medicamentos.
Y fue más allá. Ante una pregunta del diputado de Esquerra Republicana Francesc Canet sobre si el Ministerio se ha planteado bajar los módulos de habitantes por farmacia, sobre todo en zonas de expansión demográfica, Soria defendió el modelo planificado de farmacia, incluso justificó su negativa a reducir los actuales módulos de botica por habitante.
Las razones
«Se puede percibir como un monopolio lo que es una distribución de funciones», dijo, al tiempo que recordó que se trata de un modelo especialmente regulado. «Las oficinas de farmacia forman parte del SNS y contribuyen en nuestros programas de promoción de salud, y además aseguran el que un medicamento o un producto sanitario esté accesible a cualquier ciudadano a cualquier hora en cualquier lugar de España, y no hay otros sistemas que lo permitan».
Y añadió: «Por supuesto que puede mejorar, es difícil encontrar un ámbito que no sea mejorable, pero es un sistema que ha generado muchos beneficios, y las alternativas, esa ola liberalizadora, aparentemente porque es poner en manos de multinacionales la propiedad de las farmacias, ha significado que los ciudadanos que viven en núcleos lejanos o pequeños dejan de tener este servicio».
De este modo, vuelve a dar su apoyo al modelo español de oficina de farmacia, lo que se suma a las palabras que usó en su discurso cuando abogó por la promoción del modelo en la Unión Europea y aseguró que «en todos los foros internacionales a los que deba o pueda asistir el Ministerio, nos esforzaremos por defender y promover los principios de equidad, universalidad, calidad y solidaridad que han hecho de nuestro sistema uno de los mejores del mundo».
Asimismo, Soria destacó la importancia de la presidencia de España en la UE, en el primer semestre de 2010, «en un momento crucial para el continente, en el que se desarrollará la construcción del Espacio Europeo de Salud».
Como ya analizó este periódico, esta circunstancia añadida a la presidencia a partir de julio de Francia, también con un dictamen motivado sobre la mesa, podría favorecer a una decisión sobre el caso español.
Pacto por la sanidad
Otro de los grandes mensajes que lanzó Soria la semana pasada es su intención de ofrecer a las comunidades autónomas un gran «Pacto por la Sanidad» entre el Gobierno de España y las comunidades autónomas y que ha sido una de las peticiones históricas del sector y de todo el entorno sanitario; precisamente, ésta fue la propuesta más aplaudida por la oposición.
Este pacto gira en torno a la cohesión y a la sostenibilidad del sistema y se fundamenta en una cartera común de servicios, unidades de referencia comunes, la racionalización del gasto, una política común de salud pública, un calendario vacunal común, regulación de los tiempos máximos de espera, entre otras medidas.
Con respecto a otras novedades en el campo de la salud pública, anunció nuevas estrategias nacionales sobre Drogas, Accidente Vascular Cerebral, EPOC, Enfermedades Raras, Salud Sexual y Reproductiva, Cuidados de Enfermería, de Equidad, salud y género y de Seguridad Alimentaria.
