Ministros y responsables de Salud de todo el mundo se reúnen desde hoy y durante una semana en una nueva Asamblea mundial de la OMS, que en esta ocasión estará marcada por la polémica gestión que ha hecho el organismo sanitario de la gripe A.
Más de 60 países estarán representados por sus ministros del ramo, quienes hoy participan en la sesión de alto nivel que inaugurará la directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan.
En la agenda de la reunión figuran asuntos de salud pública como la «preparación para una pandemia de gripe», las regulaciones internacionales de salud, el control de la marcha de los Objetivos del Milenio relacionados con la salud, enfermedades como la tuberculosis, el sida o la hepatitis, o las estrategias para reducir el uso del alcohol.
Pero la gestión de la gripe AH1N1, que apareció hace algo más de un año en México y de la que la OMS declaró una pandemia en junio de 2009 estará, sin duda, en el centro de los debates.
Y ello después de que el organismo sanitario mundial haya sido acusado de connivencia con la industria farmacéutica, tras haber desatado el pánico por una enfermedad que finalmente se reveló benigna, pero que llevó a los gobiernos a hacer gastos millonarios en vacunas que nunca se utilizaron.
Desde la aparición del virus, unas 18.000 personas han muerto en todo el mundo por la gripe A, según los datos de la OMS, una cifra muy inferior a las 500.000 personas que fallecen cada año por la gripe estacional, o a los cientos de miles de muertos por otras enfermedades.
La OMS estableció hace unos meses un comité de revisión para evaluar esta gestión de la gripe A, debido a las numerosas presiones, pero en esta Asamblea sólo se espera que se presente un informe muy preliminar.
