El consumo de nueces puede ofrecer protección contra la colitis ulcerosa, según un nuevo estudio realizado por investigadores de UConn Health y Texas A&M University, según recoge sciencedaily y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
A través de su complejo conjunto de compuestos naturales y fitoquímicos, se ha demostrado que las nueces brindan múltiples beneficios para la salud, incluida la protección contra la inflamación y el cáncer de colon.
Los últimos hallazgos de un estudio de ratones, publicado en la revista Nutrients, descubrieron que el consumo de nueces también ofrecía protección contra la colitis ulcerosa inducida experimentalmente.
La colitis ulcerosa es una forma de enfermedad inflamatoria intestinal (EII) caracterizada por inflamación crónica del tracto gastrointestinal. En 2015, se estima que 3 millones de adultos estadounidenses informaron haber sido diagnosticados con EII, ya sea enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa, según los Centros para el Control de Enfermedades.
El estudio actual, dirigido por el Dr. Daniel Rosenberg, profesor de medicina, y Masako Nakanishi, becario postdoctoral, en el Centro de Oncología Molecular de UConn Health, evaluó los efectos de la suplementación dietética de nueces en un modelo de colitis, donde la lesión de la mucosa del colon es inducida por el agente ulcerogénico dextrano sulfato de sodio. Las nueces representaron el 14 por ciento de la dieta diaria en el estudio, equivalente a 20 a 25 nueces en un ser humano.
Cuando a los ratones se les dieron nueces durante aproximadamente dos semanas, sufrieron mucho menos daño a sus colon durante un episodio de colitis ulcerosa y el proceso de reparación de la mucosa del colon pareció mejorar después de la suplementación de nueces. Se hace referencia al proceso como un preacondicionamiento del colon por ingestión de nueces. Aunque no se pudo determinar si el colon preacondicionado resistía el daño ulcerogénico inicial (inductor de úlceras) o facilitaba la reparación del daño, la extensión de la lesión en los ratones tratados con nuez fue mucho menor que en los no tratados ratones.
Además, cuando se evaluaron los cambios en los metabolitos en la corriente fecal y el tejido, después de dos semanas de haber sido alimentados con nueces, se observaron varias alteraciones. Este descubrimiento adicional, realizado por Cory Klemashevich, científico asistente de investigación en la Universidad Texas A&M, mostró algunos cambios en los metabolitos que podrían ser clave para comprender mejor cómo se pueden metabolizar las nueces y cómo funcionan en el colon.
«Continuamos nuestro trabajo para comprender si esos cambios metabólicos son parte de la protección», dice Rosenberg. «No estamos sugiriendo que las personas con colitis ulcerosa se mantengan con una dieta grande de nueces entre brotes activos. Sin embargo, esperamos poder determinar los compuestos activos (nutrientes, fitoquímicos) en las nueces que causan protección». »
Se están realizando más investigaciones para comprender el impacto en los humanos. Actualmente, el laboratorio de Rosenberg está ejecutando un ensayo clínico realizado por Bruno S. Lemos, estudiante graduado en Ciencias de la nutrición. Los participantes consumen dos onzas de nueces diariamente durante tres semanas antes de una colonoscopia programada. Se analizarán sus metabolitos y microbiota intestinal y se evaluarán sus biomarcadores.
