La proporción de jóvenes en Finlandia diagnosticados con depresión en servicios especializados está aumentando, mostró un estudio basado en un amplio conjunto de datos nacionales. Un número cada vez mayor de adolescentes busca y recibe ayuda, pero el aumento en el uso del servicio sobrecarga los servicios especializados. El estudio fue realizado por el Centro de Investigación en Psiquiatría Infantil de la Universidad de Turku en Finlandia, según recoge sciencedaily y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
La proporción de individuos que recibieron un diagnóstico a la edad de 15 años en servicios especializados aumentó 53% entre los niños y 65% entre las niñas nacidas entre 1994 y 2000 en comparación con los jóvenes nacidos entre 1987 y 1993.
Según la autora principal, Dra. Svetlana Filatova del Centro de Investigación de Psiquiatría Infantil, los resultados no implican un aumento de la depresión entre los adolescentes.
«Los resultados probablemente pueden explicarse por un aumento en el uso del servicio. Un número cada vez mayor de adolescentes deprimidos reciben ayuda en una etapa temprana que es positiva», dice Filatova.
Ha habido un aumento en el uso de servicios psiquiátricos entre los adolescentes en los últimos 20 años tanto en Finlandia como en todo el mundo.
«El aumento en el uso del servicio puede reflejar una mejor identificación de la depresión y una actitud más positiva hacia la salud mental», continúa Filatova.
Examinar los cambios temporales identifica los desafíos en la atención médica
El conocimiento de las tendencias temporales de la depresión es importante para la prevención de enfermedades y la planificación de la atención médica. Sin embargo, pocos estudios hasta ahora han examinado estos para la incidencia y la incidencia acumulada de depresión diagnosticada desde la infancia hasta la edad adulta temprana.
Según Docent David Gyllenberg del Centro de Investigación de Psiquiatría Infantil, es importante monitorear los cambios en la incidencia de la depresión para abordar oportunamente los desafíos que enfrentan los servicios de salud mental.
«El rápido aumento en el número de niños y adolescentes diagnosticados con depresión plantea una carga para los servicios especializados de salud mental que necesitan proporcionar un tratamiento basado en la evidencia para una creciente población de pacientes», enfatiza Gyllenberg.
Los datos consistieron en 1.240.062 personas, incluidas 37.682 personas con un diagnóstico de depresión que habían visitado atención especializada al menos una vez. El 10% de las mujeres y el 5% de los hombres que habían sido seguidos hasta los 25 años habían sido diagnosticados con depresión.
