Una figura sombría se precipitó por la puerta. «Tenía un cuerpo esquelético, rodeado por un aura blanca y borrosa», recuerda Dom. La figura flotaba y no parecía tener cara. Dom, que prefiere usar solo su primer nombre, había estado profundamente dormido. Solo 15 en ese momento, entró en pánico y cerró los ojos. «Solo lo vi por un segundo», recuerda. Ahora es un adulto joven que vive en el Reino Unido. Pero aún recuerda la experiencia vívidamente, según recoge sciencenews y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
¿Era la figura un fantasma? En la mitología de los Estados Unidos y muchas otras culturas occidentales, un fantasma o espíritu es una persona muerta que interactúa con el mundo vivo. En las historias, un fantasma puede susurrar o gemir, hacer que las cosas se muevan o caigan, ensuciarse con la electrónica, incluso aparecer como una figura oscura, borrosa o transparente.
Las historias de fantasmas son muy divertidas, especialmente en Halloween. Pero algunas personas creen que los fantasmas son reales. La Universidad Chapman en Orange, California, realiza una encuesta anual que pregunta a las personas en los Estados Unidos sobre sus creencias en lo paranormal. En 2018, el 58 por ciento de los encuestados estuvo de acuerdo con la declaración, «Los lugares pueden ser perseguidos por espíritus». Y casi una de cada cinco personas de los Estados Unidos dijo en otra encuesta, realizada por el Centro de Investigación Pew en Washington, DC, que He visto o estado en presencia de un fantasma.
«Había estado escuchando ruidos en el techo a la misma hora todas las noches», dice Clare Llewellyn-Bailey, quien ahora es estudiante en la Universidad de Gales del Sur. Una noche, un gran golpe la llevó a agarrar su cámara. Esta fue la primera foto que tomó. Otras fotos que tomó eso y las noches posteriores no mostraron nada inusual. ¿Esta historia hace que parezca que existen fantasmas? ¿O es la figura brillante un destello de luz que la cámara capturó accidentalmente?
En los programas de televisión de caza de fantasmas, las personas usan equipo científico para intentar grabar o medir la actividad espiritual. Y numerosas fotos y videos espeluznantes hacen que parezca que existen fantasmas. Sin embargo, ninguno de estos ofrece buena evidencia de fantasmas. Algunos son engaños, creados para engañar a la gente. El resto solo prueba que el equipo a veces puede capturar ruido, imágenes u otras señales que las personas no esperan. Los fantasmas son los menos probables de muchas explicaciones posibles.
No solo se supone que los fantasmas pueden hacer cosas que la ciencia dice que son imposibles, como volverse invisibles o atravesar paredes, sino que también los científicos que utilizan métodos de investigación confiables han encontrado cero pruebas de que existen fantasmas. Sin embargo, lo que los científicos han descubierto son muchas razones por las cuales las personas pueden sentir que han tenido encuentros fantasmales.
Lo que muestran sus datos es que no siempre puedes confiar en tus ojos, oídos o cerebro.
«Soñando con los ojos abiertos»
Dom comenzó a tener experiencias inusuales cuando tenía ocho o nueve años. Se despertaba incapaz de moverse. Investigó lo que le estaba pasando. Y aprendió que la ciencia tenía un nombre: parálisis del sueño. Esta condición deja a alguien sintiéndose despierto pero paralizado o congelado en su lugar. No puede moverse, hablar o respirar profundamente. También puede ver, escuchar o sentir figuras o criaturas que realmente no están allí. Esto se llama alucinación (Huh-LU-sih-NA-shun).
A veces, Dom alucinaba que las criaturas caminaban o se sentaban sobre él. Otras veces, escuchó gritos. Solo vio algo esa vez, cuando era adolescente.
La parálisis del sueño ocurre cuando el cerebro arruina el proceso de quedarse dormido o despertarse. Por lo general, solo comienzas a soñar después de estar completamente dormido. Y dejas de soñar antes de despertarte.
