La optimización de los procesos de almacenamiento de células encapsuladas mediante la criopreservación lenta es la interesante premisa del trabajo de la investigadora Haritz Gurruchaga de la Universidad del País Vasco.
Sobre este asunto, se ha hecho eco la revista Scientific Reports en su artículo Cryopreservation of human mesenchymal stem cells in an allogeneic bioscaffold based on platelet rich plasma and synovial fluid.
La aplicación de esta técnica puede abrir nuevo horizontes en el uso médico de las células madre mesenquimales que ya, de por si, se está incrementando de manera considerable en la última década.
Como señalan en el portal web Noticias de la ciencia,
Las últimas investigaciones parecen mostrar que estas células son capaces de regenerar el tejido dañado y cambiar la comunicación circundante del tejido inflamado, pudiendo reducir el dolor causado por esa enfermedad.
En el caso de tratar tejidos cartilaginosos, diversas investigaciones han descrito que las células madre derivadas del líquido sinovial poseen características superiores a las extraídas de otros tejidos.
De este modo el grupo NanoBioCel de la Facultad de Farmacia de la UPV, dirigido por el catedrático José Luis Pedraz la preservación de diversas células en biomateriales es una nueva línea de investigación.
Existen diferentes métodos para la preservación de células en biomateriales, pero en NanoBioCel se han especializado en la criopreservación lenta, donde las muestras han de ser tratadas previamente y son congeladas siguiendo un perfil de congelación concreto, permitiendo recuperar su función y características tras su descongelación.