Que la longevidad y la criopreservación son dos temas cuyo interés crece de manera exponencial es un hecho plausible. Los retos de futuro relacionados con la erradicación de enfermedades, el cambio de paradigma en la política de trasplantes e, incluso, el todavía sueño de la inmortalidad ha saltado al prime time de las televisiones.
En La Sexta van a dedicar una serie de reportajes en el programa “Enviado Especial” en que nos hablan del futuro que está a la vuelta de la esquina. Como cuenta su presentador, Jalis de la Serna, ha sido un viaje de seis meses alrededor del mundo buscando los lugares donde se trabaja por el futuro de la salud y la sostenibilidad.
Un detalle que dice más de lo que pensamos sobre nuestro país y nuestra cultura, es que varios de los protagonistas de estos retos son españoles o hablan en nuestro idioma. De la Serna realiza una primera parada en la Universidad de Sevilla donde el investigador Ramón Risco demuestra que se le puede dar al pause al tiempo de la vida.
Trabaja en la criopreservación de pequeños gusanos a los que consigue devolver a la vida. Lejos de pretender a corto plazo llevar esta tecnología al ser humano, Risco y su equipo trabajan en poder hacer lo mismo con órganos humanos.
De esta manera, criopreservando órganos, no seríamos esclavos del tiempo a la hora de realizar este tipo de intervenciones.
Otro español, en este caso Juan Carlos Izpisúa que trabaja en el Salk Institute de California, aparece en el reportaje trabajando en otro proyecto relacionado con los órganos. Izpisúa investiga el modo de cultivar órganos humanos en embriones de cerdo. Así en la edad adulta, ese órgano podría darle una segunda vida un ser humano.
Son trabajos necesarios, aseguran los investigadores, ya que si vamos a vivir más años necesitaremos órganos de repuesto para hacer de esa longevidad un tiempo de calidad.
El viaje de Jalis de la Serna le lleva también a las instalaciones de Alcor en Arizona (EEUU) donde cientos de personas están criogenizadas esperando un futuro en que la medicina les permita volver a la vida y dejarla donde la habían dejado. Allí les espera el ingeniero José Luis Cordeiro, uno de los más acérrimos defensores de este Plan B una vez que nuestra vida llega va a llegar a su fin.
Reconoce Cordeiro que hoy no hay garantías de que esas personas puedan volver a la vida, pero todo forma parte un proceso de desarrollo de tecnologías que, tal vez, serán comunes en el futuro.
Estos tres exponentes del futuro de la medicina fueron tres de los protagonistas del I Congreso Internacional de Longevidad y Criopreservación que se celebró en Madrid en mayo de 2017, organizado por la Fundación Vidaplus, y fue de los pioneros en poner sobre las mesas de debate estos interesantes retos de futuro.