Imprimir órganos y tejidos humanos podría ser tan fácil en el futuro como imprimir sobre papel hoy en día. Investigadores de la Universidad de Missouri trabajan en el desarrollo de una impresora tridimensional que permitiría crear órganos a partir de una «tinta biológica» (bio-ink).
La principal ventaja sería la eliminación de la búsqueda de un donante compatible. Además se podrán crear tejidos en base a los precisos requisitos que necesita el paciente.
Actualmente, el equipo investigador está trabajando en la «impresión» de una vena. La tinta que utilizan se coloca en un papel especial que se disuelve lentamente dando paso a formas de órganos y tejidos.
Los desarrollos están en fase inicial. Se espera empezar a probar con humanos en cinco años.
El doctor Gabor Forgacs es el responsable del primer prototipo. El medio estadounidense NPR le entrevistó y pueden ver sus explicaciones detalladas del evento en On-Demand Body Parts: Inventing The Bio-Printer.