La mejor arma es una buena limpieza
La limpieza facial es una apuesta segura para prevenir los puntos negros y evitar que salgan de nuevo. Sabemos que es complicado pero, una vez te acostumbres a hacerlo, verás como notas tu piel mucho mejor. Sigue leyendo para saber qué más debes hacer para decir adiós a los puntos negros para siempre.
Para limpiar la cara… ¿sirve cualquier producto?
La respuesta es no. Si tu piel es grasa o mixta -que es donde se suele producir más el problema de poros obstruidos-, limpia a fondo tu cutis, mañana y noche, con productos que necesiten aclarado. Este gel limpiador es no comedogénico, actúa sobre la hiperqueratosis (el acúmulo de las células muertas que cubren la salida del poro) y elimina el exceso de grasa, según recoge clara.
Si prefieres otro formato igual de efectivo…
Una de las fórmulas más eficaces para frenar las imperfecciones como los puntos negros son las pastillas libres de jabón, como esta, que ayuda a eliminar espinillas y puntos negros. Está elaborada con hamamelis, extracto de pepino y proteína de seda, tres ingredientes que purifican y matifican la piel.
Agua micelar para las pieles más sensibles
Si tu piel es frágil o sensible, una muy buena opción son las aguas micelares. La ventaja es que, además de limpiar, no es necesario el uso posterior de tónico. Las aguas micelares también son aptas para pieles grasas o con tendencia a las imperfecciones como esta, que ayuda a disminuir el exceso de sebo y se puede usar también para desmaquillar los ojos.
