El gobierno del estado de Nueva York aprobó la enmienda que prohíbe rechazar las vacunas en las escuelas por razones religiosas, según la agencia de noticias Associated Press. La ley estrechamente relacionada con el brote de sarampión en los Estados Unidos entró en vigencia inmediatamente, pero dará a los estudiantes no vacunados unos 30 días para presentar las pruebas que habían recibido las vacunas necesarias para estudiar en la escuela, según recoge la autora original de este artículo Yana Berman en N+1 y comparte Paula Dumas para Periodista Digital
Numerosos estudios, dedicados en su mayoría a la vacuna triple vírica, también conocida como SPR, indican que no hay ninguna conexión entre la vacunación y los trastornos de espectro autístico. Sin embargo, cada vez más pacientes se convierten en los adversarios de vacunas. El rechazo de vacunación está mencionado incluso en una lista de amenazas globales para la humanidad de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Para proteger a los niños, los gobiernos de varios países introducen las leyes que implican ciertas medidas tanto para los enemigos de la vacunación como para sus niños. Por ejemplo, en Australia las familias que rechazan las vacunas carecen de protección social, como subsidios. E Italia este marzo ha aprobado una ley, según la cual los niños no vacunados no pueden asistir a la escuela y al jardín de infancia.
Gobiernos toman medidas contra antivacunas
En los Estados Unidos, los requisitos relacionados con la vacunación de los niños están regulados a nivel estatal. Se aplican tanto a las vacunas necesarias como a las excepciones, las cuales permiten a los padres rechazar la vacunación. Las reglas de los 50 estados del país dejan rechazar una determinada vacuna por razones médicas, como reacción alérgica a ciertos componentes del medicamento. Sin embargo, solo en 16 estados es posible rechazar las vacunas por razones filosóficas y personales.
El 13 de junio de 2019, el estado de Nueva York se convirtió en el quinto estado de los EE.UU. que impuso la prohibición de rechazar la vacunación por motivos religiosos. La ley fue introducida debido en gran medida al brote más grande de sarampión en los últimos 27 años. Desde el comienzo de 2019, los médicos han registrado alrededor de 700 casos de esa enfermedad, muchos de los cuales afectaron a la comunidad judía ortodoxa de Nueva York.
El año pasado, la OMS ya había planteado la cuestión de difusión de sarampión en Europa. En abril de 2019, la organización informó que en comparación con el mismo periodo de 2018, los casos de la enfermedad se triplicaron no solo en Europa, sino en todo el mundo.
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