Por desgracia es algo que sucede con mucha frecuencia. Murió el pasado 27 de agosto, pero su cadáver sigue en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla porque ningún familiar quiere hacerse cargo del cuerpo ni asumir el entierro, según recoge el autor original de este artículo B. Rodríguez en 20minutos y comparte Francisco Lorenson para Periodista Digital.
Así lo ha denunciado este miércoles el sindicato CSIF, que ha lamentado la «falta de coordinación por parte de las Administraciones locales y sanitarias» para resolver su situación, mientras se está actualmente a la espera de que sea el Ayuntamiento de Los Palacios y Villafranca (Sevilla), de donde era vecino el difunto, el que se haga cargo del cuerpo.
CSIF explica que el fallecido murió en el Virgen del Rocío el día 27 de agosto y, desde entonces, se encuentra en las cámaras habilitadas en el edificio de Anatomía Patológica. Estas cámaras refrigeradas, según aclara, sólo se usan para «un breve espacio de tiempo, ya sea por la realización de una autopsia o mientras se tramita su sepelio, ya que la descomposición del cuerpo, aunque se ralentice, sigue su curso».
Sin embargo, advierte de que al no aparecer familia que se haga cargo, «empieza a fallar la burocracia y aunque existen procedimientos para estos casos, algo ha fallado». Así, el día 19 de septiembre delegados del CSIF en el centro hospitalario avisan al director gerente del centro sobre la situación «tan grave y anómala que se estaba produciendo», pidiéndole su intercesión para agilizar el trámite.
Además, indica que esta situación se ha agravado tras averiarse la cámara donde están los restos la pasada semana, teniendo que trasladar estos a otra. «Estamos hablando de un cadáver en putrefacción, con lo que ello conlleva de peligrosidad y problemática en su manipulación, una situación que ha trasladado el delegado de Prevención al comité de seguridad y salud», añade.
Actualmente, el cuerpo continúa en las dependencias del hospital «a falta de la gestión del Ayuntamiento de Los Palacios», ya que el fallecido era vecino de dicho municipio y les correspondería hacerse responsable de su sepelio. Además, CSIF señala que desde la empresa funeraria se advierte de que «desde el Consistorio palaciego comunicaron que estaban en fiestas y que cuando finalizaran se harían cargo».
Sin embargo, la feria de Los Palacios finalizó el día 29 de septiembre y, «por la ineficacia y pasividad de las Administraciones local y sanitaria, el difunto sigue esperando para poder descansar en paz».
El entierro, esta semana
El Ayuntamiento de Los Palacios, por su parte, ha explicado que «desde el minuto uno» están trabajando en el caso, negando con rotundidad que no hayan actuado por encontrarse en fiestas. De hecho, esta misma semana procederán a enterrarlo.
Según ha señalado la delegada de Bienestar Social del Consistorio palaciego, el fallecido residía en Los Palacios desde principios de este año con su pareja, ambos de procedencia sudamericana. Al fallecer, su compañera, con la que tenía un hijo en común, comunicó al Ayuntamiento que no podía hacerse cargo del cuerpo. Y les informó de que el finado tenía mujer e hijos en Brasil, además de otros vástagos en diferentes puntos de España.
El Consistorio ha contactado tanto con la mujer en Brasil como con todos los descendientes (también en Málaga y Zamora), pero todos se han negado a hacerse cargo del cuerpo porque el fallecido «había roto relaciones», continúa el Ayuntamiento. Tras estos contactos y después de cerrar el contrato pertinente con una empresa local, el cuerpo será enterrado esta semana.
Procedimiento habitual
Mientras tanto, fuentes del Virgen del Rocío explican que cuando ingresa un paciente, trata de localizar a los familiares o allegados, sobre todo, en casos de fallecimiento.
Si no tiene éxito, se pone en contacto con el Ayuntamiento que corresponde a su lugar de residencia por ser la administración con las competencias para dar sepelio a las personas de las que nadie se hace cargo tras su fallecimiento o que no tienen recursos económicos. Mientras, custodia el cuerpo en las cámaras frigoríficas.
Si el Ayuntamiento, los familiares o allegados no se hacen cargo, en última instancia da parte al juzgado para que la autoridad judicial resuelva la situación del cadáver.
