Un estudio revela las propiedades sanas y nutritivas del clásico pan con fiambre

¿Quiere dar a su hijo una merienda sana? Prepárele un bocadillo

¿Quiere dar a su hijo una merienda sana? Prepárele un bocadillo
Un apetitoso bocadillo.

La obesidad infantil preocupa. Al margen de medidas como la retirada de máquinas de vending en los centros escolares donde normalmente el niño tenía a su alcance el paraíso del colesterol en forma de bollos grasientos, chocolatinas varias y chuches de formas y sabores imposibles, un estudio realizado por el Hospital Infanta Sofía de Madrid rescata del olvido el bocadillo como remedio saludable para que los más pequeños y quienes no lo son tanto puedan disfrutan de una sana, equilibrada y nutritiva merienda o tentempié.

La Razón, en su edición del 16 de octubre de 2011, se hace eco de este pormenorizado estudio sobre los beneficios del bocadillo –Bocadillos: sana costumbre contra la obesidad infantil-:

El hecho de que la base sea el pan hace que formen parte de los hidratos de carbono, presentes en la base de la pirámide de la alimentación saludable. Al ir acompañado con algún fiambre o queso constituye una fuente de proteínas, vitaminas del grupo B y minerales.

El análisis incide en un hecho fundamental, la cantidad de pan que se utilice para el bocadillo:

Se recomienda tomar como referencia consumir alrededor de los 200 gramos de pan diarios que se pueden dividir en cuatro raciones de 50 gramos y distribuirlos a lo largo de las diferentes comidas del día. El tamaño debe venir determinado por la edad y actividad física del niño. Así, en torno a ocho dedos de barra fina para los deportistas o la mitad si se trata de una persona que se mueva menos, sería lo más indicado.

Y también sobre qué clase de pan es más saludable:

Es verdad que el pan molde resulta más cómodo porque no hay que comprarlo a diario, como sucede con el de barra, los expertos coinciden en que no debe protagonizar la base de este producto, sino que conviene recurrir a él de forma esporádica. Y es que el pan de molde aporta grasa y menos agua y fibra que el de barra.

En cuanto a los ingredientes que debe llevar el clásico ‘bocata’, ganan por goleada los fiambres magros, quesos tiernos o curados, atún o sardinas. De forma menos frecuente, los patés y ya como cuestión excepcional el delicioso, pero muy calórico bocadillo con crema de cacao o con una barrita de chocolate.

NO SÓLO PARA NIÑOS

Y no sólo el bocadillo es ideal para los más pequeños:

Un adulto con peso normal y que realice actividad física puede complementar la media mañana o la merienda con un pequeño bocadillo. Los adultos tienen la errónea creencia de que el pan es un alimento poco interesante desde el punto de vista nutricional y, además, piensan que engorda. Lo que está claro es que aquellos que lo eliminan de su dieta, -ahora están de moda las dietas en las que los carbohidratos se evitan- aumentan la ingesta de grasas y proteínas. El pan de bocadillo parece estar proscrito cuando es un alimento completo, sabroso y barato.

 

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Juan Velarde

Delegado de la filial de Periodista Digital en el Archipiélago, Canarias8. Actualmente es redactor en Madrid en Periodista Digital.

Lo más leído