Con respecto al calcio, OCU ha dado una calificación de «aceptable» a las marcas que tenían de 105 a 113 mg por 100 ml, y la mitad no pasa de ahí
El reportaje es de Israel Viana y aparece en ‘ABC’. Pone los pelos de punta o para ser más exactos, cierra algún estómago.
La leche, un alimento básico que consumimos a diario, desde los más niños a los más ancianos, imprescindible en nuestra dieta. Pero, ¿es la leche que compramos en el supermercado ese producto de calidad y nutritivo que suponemos?
Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que ha analizado 47 marcas españolas, esto no está tan claro, hasta el punto de que un juez acaba de avalar dicho informe sobre el deterioro de su calidad, en contra de la demanda interpuesta por la Federación nacional de Industrias Lácteas (Fenil).
Para OCU hay incluso 10 marcas «cuya compra se desaconseja vivamente», entre las que se encuentran, por ejemplo, Puleva, RAM o Río (ver lista completa abajo). Marcas que no han respondido a la llamada de este periódico para dar su opinión.
Entre las conclusiones del informe, destaca que muchas de las 47 marcas de leches analizadas no aportan el contenido mínimo de grasa, son más pobres en calcio que hace 20 años, han sufrido tratamientos térmicos muy agresivos, que puede llegar a degradar las vitaminas y las proteínas, y algunas otras han usado leches demasiado viejas.
En la escala de calificación de 1 a 100 establecida por OCU, nunca antes había habido diferencias tan abismales entre las diferentes marcas.
La leche de mejor calidad, Pascual, ha obtenido un 80, mientras que la de peor, Polesa, tan sólo un 10. Y en el anterior informe, de hace 10 años, las leches de peor calidad eran menos numerosas y los peores resultados no llegaban a niveles tan bajos.
NOTA .- leer reportaje completo en ‘ABC‘