La Generalitat valenciana ha denunciado la «situación límite» en la que se encuentra el Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia –de titularidad estatal y gestión autonómica– debido a la demora de las obras de la V fase de ampliación, lo que ha provocado que el centro sufra diversas deficiencias, como estructuras apuntaladas, almacenes obsoletos y falta de espacio expositivo. Por ello, el Consell exige al Ministerio de Cultura que «replantee» el proyecto y fije unas fases de ejecución «reales» y con la correspondiente dotación económica.
Así lo han expresado el secretario autonómico de Cultura, Rafa Miró, y la directora general de Patrimonio Cultural, Paz Olmos, que han realizado un recorrido por la zona del museo afectada por la V fase para enseñar a los medios de comunicación el estado de la pinacoteca. Esta intervención prevé, entre otras mejoras, ganar unos 10.000 metros cuadrados de superficie –más de 700 de ellos en almacenes–, una nueva entrada por los Jardines de Viveros, una biblioteca y la instalación de una cafetería en el pabellón Benlliure. Asimismo, afecta tanto al museo como a la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos.
Entre las zonas que se han mostrado –a otras como el torreón no se ha podido acceder por «razones de seguridad»– figuran lo que será la entrada a la nueva biblioteca, que actualmente se encuentra apuntalada con un andamio; el almacén visitable, donde se acumulan «maravillas pictóricas» de autores de primera fila, como Muñoz Degraín, a causa de la falta de espacio; o el almacén inferior a la sala de didáctica, cuyo techo también presenta apuntalamiento y que no reúne las condiciones «propias de los museos del siglo XXI», ha recalcado Paz Olmos.
La directora general ha puesto de relieve que la primera fase de actuación sobre el San Pío V acabó en el año 1990 y que desde 2003, cuando culminó la cuarta, no se ha acometido la siguiente etapa por lo que las instalaciones están «obsoletas». En este sentido, los representantes de la Conselleria de Cultura han insistido en que el Ministerio «conoce esta situación», ya que uno de los informes que tiene en su poder explica e incluye imágenes de estos problemas.
Por ello, el secretario autonómico de Cultura ha recalcado que la Generalitat está «cansada y ha decidido plantarse para pedir al Ministerio que deje de engañar a todos los valencianos con mentiras que se han ido reproduciendo año tras años. «Hemos mantenido hasta ahora una posición de confianza pero ahora los datos nos avalan y muestran que el Gobierno de Zapatero ha eliminado de su agenda este proyecto; hemos querido dialogar porque nuestro objetivo no es político sino de interés general», ha aseverado.
Miró ha subrayado que el «abandono» de la ampliación se refleja en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2011, que únicamente contemplan la «ridícula» cantidad de 140.000 euros y una proyección económica hasta 2014 de 1,9 millones, cuando el proyecto está valorado en unos 17 millones.
En este punto, ha recordado que la semana pasada Paz Olmos mantuvo una reunión en Madrid con la directora general de Bellas Artes y Bienes Culturales y la subdirectora de la Gerencia de Infraestructuras del Ministerio en la que se le informó de que «rascando» de algunas partes se podría llegar a invertir el año próximo 350.000 euros. «Seguimos haciendo el ridículo», ha sentenciado Miró, para quien esta cantidad es «un ‘no’ encubierto». Por su parte, Paz Olmos ha calculado que con partidas anuales de esa cuantía la obra podría prolongarse «más de 42 años».
«AGRAVIOS COMPARATIVOS»
El secretario ha hecho notar además que el Consell es consciente de que la situación económica actual es complicada pero ha matizado que «lo que no es tolerable es que otros museos similares» sí reciban dotación, como es el caso, ha dicho, de los de Málaga, con 10,7 millones, o Sevilla, con algo más de 18. «No es que no entendamos los recortes, lo que no entendemos son los agravios comparativos», ha defendido.
Igualmente, Rafa Miró ha criticado la «descoordinación» del Gobierno socialista con el grupo parlamentario del PSOE, que ha aprobado una enmienda para que en 2011 se dedique 1.140.000 euros al San Pío V, mientras el propio Ejecutivo dice que sólo podrá invertir 350.000 «porque no tiene ese dinero». La directora general de Patrimonio ha subrayado la importancia de que se añadiera realmente ese millón de euros, puesto que permitiría licitar el proyecto, «que es lo que tenemos que conseguir entre todos», ha recalcado.
«No aguantamos más esta situación por lo que exigimos, cargados de razón, un replanteamiento de esta obra, que se ofrezca ya una planificación de anualidades para llegar a los 17 millones de euros, y que se conozcan los plazos de ejecución porque es el Museo de Bellas Artes de Valencia es un centro emblemático y prioritario aunque parezca que al Gobierno central se le haya olvidado», ha rematado Miró.
