El documental ‘María y yo’, ópera prima de Félix Fernández de Castro basada en la novela gráfica de Miguel Gallardo, se estrenará este viernes, aunque el público que ya ha podido verlo en festivales como el de Málaga o Tarragona ha salido encantado con sus ramalazos de sinceridad.
El documental se centra en unas vacaciones del dibujante catalán Gallardo con su hija autista, María, en el resort del Sur de Gran Canaria, donde María vive con su madre. La ‘road movie’ acaba siendo un relato original y lleno de humor de cómo convivir con una discapacidad.
Gallardo ha asegurado en rueda de prensa en Barcelona que María tiene «golpes escondidos» y que, pese a tener 15 años, a veces puede hacer cosas «de una niña de tres». «Tiene un autismo severo, y leer o escribir está totalmente fuera de contexto».
Según el director, han hecho «exactamente» lo que les ha dado «la gana», y a las 60 horas de rodaje se le sumaron otras tantas o más de montaje «muy duro». Las imágenes grabadas se combinan en ocasiones en la pantalla con ilustraciones de Gallardo, Premio Nacional de Cómic 2008.
Gallardo ha recordado hoy una vez que María cumplió años y Fernández de Castro le preguntó qué podía regalarle a la niña: «Papelitos», dijo Gallardo, porque «a María los regalos convencionales no le gustan. Los abre, los mira y los tira», ha dicho. «La caja de papelitos se convirtió en el regalo estrella», ha sentenciado.
Para el director, en la película hay «mil escenas» de una comicidad «brutal» entre padre e hija, «totalmente impredecible» e imposibles de amañar. En la novela gráfica hay muchas «conversaciones surrealistas» entre los dos que tampoco podían recrearse en el filme, pero surgieron otras del mismo calado, ha asegurado el director.
