El Teatro de la Zarzuela acogerá la obra ‘El Niño Judío’, con música de Pablo Luna y libreto Antonio Paso y Cano y Enrique García Alvarez, del 16 de diciembre al 16 de enero, en una apuesta por el humor absurdo en «tiempos pacatos y llenos de corrección política».
Según ha explicado en un encuentro con la prensa el director de escena, Jesús Castejón, que ya había participado en un pase de la obra como actor, se planteó por primera vez las motivaciones de los personajes como director y percibió que no había nada que razonar.
«Cuando yo me enfrenté a este texto por primera vez, me limité a hacer mi papel y a no tropezarme con los muebles. Pero cuando me tocó dirigir, me di cuenta de que no le pasaba nada a nadie. No había nada que razonar en la obra, solo había que hacerlo», ha dicho Castejón.
La obra, estrenada en 1918, gira en torno a las esperpénticas peripecias de tres personajes, Samuel, Concha y Jenaro, que inician un viaje de fortuna en busca del padre adoptivo del primero, un rico judío que habita en Siria y que se encuentra al borde de la muerte.
A medida que avanza la acción, el argumento de ‘El Niño Judío’ se diluye como el azúcar en un tazita colmada de humor absurdo, funcionando, asimismo, como una parodia de la literatura de viajes, tan de moda a finales del siglo XIX y a comienzos del siglo XX.
«El argumento de la obra no es más que un pretexto para poner en funcionamiento una dinámica de viajes. Es anecdótico, y a la media hora se nos ha olvidado. Y nosotros estamos aquí para darle una vuelta de tuerca más», ha explicado el intérprete Jesús Castejón.
TRES CASTIZOS EN LA INDIA
De esta forma, los protagonistas pasan del Madrid castizo a las plazas de Siria o los palacios de la India, formando un contraste «divertidísimo» que funciona por sí solo y que transmite la comicidad, de forma automática, a cada una de las butacas del teatro.
Por su parte, el actor Rafa Castejón, que interpreta el papel de Samuel, ha explicado que esta obra supone una «oportunidad» para acercar la Zarzuela a los niños y a los jóvenes, que, según él, «cuando se les habla del género piensan que huele a naftalina».
En este sentido, Jesús Castejón, ha denunciado la falta de apoyo al teatro desde el Ministerio de Educación, que «no incluye» en su programa «la necesaria formación» en Artes Escénicas, influyendo en la defenestración de un género que tiene dificultades para subsistir.
«La Zarzuela cultiva un humor muy culto. Hay que conocer el castellano para entender parte de sus textos. Y que los jóvenes no lo hagan es culpa de los responsables de Educación. El teatro ya no está incluido en la formación de los jóvenes», ha concluido el director.
